Tu primer empleo no es un reto solitario: competencias que abren puertas laborales

Cuando Gabriela, estudiante de octavo semestre de Ingeniería Comercial, comenzó a navegar en redes sociales en busca de su primer empleo, se dio cuenta de que no bastaba con tener buenas notas. Entre los algoritmos de LinkedIn y los filtros exigentes de las ofertas laborales, entendió que necesitaba mucho más que conocimientos técnicos.
«Quería saber qué valoran las empresas, qué esperan de nosotros los jóvenes. Así llegué a una feria de empleabilidad, donde entendí que el mundo laboral es más complejo, pero también más accesible si uno se prepara con las herramientas adecuadas», cuenta.
Gabriela es parte de una nueva generación de estudiantes que sabe que el título universitario es apenas el comienzo. Para insertarse en un mercado laboral competitivo y en constante transformación, es necesario desarrollar habilidades clave, adaptarse a nuevas formas de trabajo y estar dispuestos a reinventarse continuamente. Así lo sostiene Rafael Vidaurre, coordinador del Observatorio Nacional del Trabajo (ONT) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
“Las máquinas pueden procesar datos, pero los humanos aún lideran la interpretación, la toma de decisiones éticas y el pensamiento crítico. Estas habilidades serán esenciales en los trabajadores del futuro”, puntualiza el experto.
Empleabilidad: el nuevo idioma profesional
El mercado laboral actual ya no se basa únicamente en el dominio de herramientas técnicas o conocimientos teóricos. Las empresas buscan profesionales capaces de comunicar sus ideas, adaptarse al cambio, colaborar en entornos híbridos y, sobre todo, mantener una actitud de aprendizaje continuo.
“Hacia el futuro, la mayoría de los trabajos implicarán el uso de herramientas digitales, automatización o interacción con inteligencia artificial”, asegura Vidaurre. Por ello, agrega, se vuelve urgente cerrar la brecha digital entre generaciones y géneros.
Entre las competencias más demandadas hoy, el experto menciona al pensamiento crítico y resolución de problemas; alfabetización digital y tecnológica; inteligencia emocional y empatía; adaptabilidad y aprendizaje continuo; colaboración remota y trabajo en equipo; creatividad e innovación; análisis de datos y pensamiento computacional; comunicación efectiva, oral, escrita y visual; conciencia social y sostenibilidad, y gestión de proyectos con toma de decisiones ágil.
Estas habilidades no son solo “buenos extras”. En muchos casos, son el principal diferenciador al momento de acceder a un empleo de calidad. El mundo del trabajo ya no se define por fronteras geográficas ni por horarios rígidos, sino por la capacidad de aprender, colaborar y aportar valor real a contextos diversos.
Ferias de empleabilidad: puentes hacia el mundo laboral
En este nuevo escenario, las ferias de empleabilidad se convierten en una herramienta crucial para conectar a los estudiantes con el mercado de trabajo. No son solo eventos informativos, sino verdaderos espacios de conexión, aprendizaje y validación de competencias.
“La feria de empleabilidad actúa como un puente porque permite que nuestros estudiantes y titulados conecten directamente con el mundo laboral. Es donde pueden conocer de primera mano lo que buscan las empresas y validar sus habilidades en entrevistas o actividades de networking”, explica Ninoska Peñaloza, directora nacional de Servicios Estudiantiles de Unifranz.
Estas ferias no solo benefician a los jóvenes, sino también a las empresas, que pueden descubrir talento fresco, motivado y con formación integral.
“Nuestro compromiso es acompañar a nuestros estudiantes en todo su camino profesional. Al conectar con grandes empresas, facilitamos que accedan a mejores empleos, conozcan distintas culturas organizacionales y se proyecten profesionalmente desde una mirada global”, agrega.
La educación no termina en el aula
Tanto Vidaurre como Peñaloza coinciden en que el acompañamiento institucional, el desarrollo de competencias blandas y técnicas, y el acceso a experiencias prácticas son claves para ampliar las oportunidades de los jóvenes. La educación, en este sentido, debe ser continua, personalizada y orientada a los desafíos del presente y del futuro.
Además, herramientas como la Red Alumni, mentorías, prácticas profesionales y simulaciones laborales permiten que los egresados no lleguen al mundo laboral “en frío”, sino con una visión clara de lo que se espera de ellos y lo que pueden ofrecer.
“Una buena estrategia de empleabilidad no solo mejora las probabilidades de inserción laboral, también incrementa la autoestima profesional del joven, su capacidad de liderazgo y su compromiso con el entorno”, subraya Vidaurre.
Empleabilidad con propósito
Los nuevos profesionales ya no buscan solo un salario: quieren trabajar en organizaciones que compartan sus valores. Empresas sostenibles, con impacto social, mentalidad inclusiva y cultura de bienestar son las que más talento joven atraen.
“Hoy se valora más trabajar en organizaciones donde el trabajador no es un simple factor de producción, sino un elemento central del proceso”, sostiene el coordinador del ONT.
Esa búsqueda de sentido también forma parte de las nuevas competencias: tener una mentalidad de crecimiento, saber gestionar el tiempo, ser capaz de aprender por cuenta propia, adaptarse a los cambios y comunicar ideas con claridad. Todo esto se enseña, se practica y se fortalece en las universidades que apuestan por la empleabilidad como parte de su ADN.
La historia de Gabriela es la de miles de jóvenes que quieren comenzar con el pie derecho en el mercado laboral. Con acompañamiento, formación pertinente y espacios reales de conexión, los nuevos profesionales tienen hoy más posibilidades que nunca de acceder a empleos de calidad, sostenibles y con propósito.
La clave está en comprender que la empleabilidad no es una meta final, sino un camino continuo que se construye con habilidades, actitud y oportunidades concretas como será la cuarta Feria de Empleabilidad de Unifranz de El Alto, que se realizará este martes 17 de junio desde las 10:00 hasta las 14:00, en el Centro de Convenciones Luxor, primer piso CINEBOL (calle Alfredo Sanjinés de Ciudad Satélite).