Prevención del suicidio: la vida tiene muchos colores y vale la pena vivirla

Prevención del suicidio: la vida tiene muchos colores y vale la pena vivirla

Por Lily Zurita

La vida está cargada de muchas alegrías, pero también sinsabores. Si alguien intentara clasificarla por un color específico fracasaría ya que la misma tiene muchos colores. La vida vale la pena vivirla pese a todas las dificultades que diariamente sopesa cada persona.

“Hay días que podemos sentirnos tristes, podemos sentirnos sin fuerzas porque hay eventos que nos desmotivan demasiado, pero también sabemos que el ser humano es capaz de vencer todas sus limitaciones porque está dotado de cualidades y un montón de potencialidades (…)”, reflexiona la directora de la carrera de Psicología de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, Liudmila Loayza, a propósito de la prevención del suicidio.

Cada 10 de septiembre, se celebra el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, fijado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a fin de promover la implementación de políticas y acciones para su prevención.

Qué es el suicidio

La OMS define el suicidio como un acto deliberadamente iniciado y realizado por una persona en pleno conocimiento o expectativa de su desenlace fatal. Es un problema multifactorial, debido a la compleja interacción de factores biológicos, genéticos, psicológicos, sociológicos y ambientales.

Datos de la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (IASP por sus siglas en inglés) dan cuenta que el suicidio se encuentra entre las 20 principales causas de muerte a nivel mundial para personas de todas las edades y que, anualmente, se producen casi 800 mil muertes en el mundo por esta causa.

En Bolivia no existen datos actualizados respecto a esta problemática. Sin embargo, datos oficiales de 2013 dan cuenta de 3.495 suicidios en el período 2008 – 2013 (Ministerio de Salud, con base en datos de la FELCC).

Factores que pueden desencadenar un suicidio

Existe un abanico de factores que pueden desencadenar un suicidio. Loayza menciona desde un trastorno de personalidad, una depresión, el consumo de sustancias controladas, un evento traumático, un historial de violencia física, psicológica o sexual, la muerte de un ser querido o la pérdida de todo lo material que se tiene.

Con mucha pena, Ignacio recuerda el fallecimiento de su papá hace como 15 años, cuando él bordeaba los 13 años. Dice que malas decisiones de su papá, tras el divorcio de su madre, lo llevaron al consumo de algunas drogas y una profunda depresión.

Cuenta que un día, aparentemente por llamar la atención, su padre tomó organofosforados y que, luego, llamó a sus familiares. Lamentablemente, todos llegaron tarde. Eduardo, su papá, falleció en la ambulancia cuando era trasladado a un nosocomio.

Entre otros factores, también se menciona el acceso a armas de fuego, antecedentes de suicidio en la familia, antecedentes de autoagresión deliberada, abandono o maltrato, vivir en comunidades caracterizadas por brotes de suicidio en personas jóvenes o una ruptura sentimental.

Si bien, los hombres son más propensos a morir por esta causa, las mujeres son dos veces más propensas a intentarlo. La mayoría de los intentos de suicidio no terminan en muerte, muchos son una llamada de auxilio.

UNifranz

Los comportamientos suicidas pueden ocurrir por una situación que la persona ve como agobiante

¿Cómo prevenir un suicidio?

La OMS sostiene que es posible prevenir los suicidios y recomienda las siguientes intervenciones:

● Restringir el acceso a los medios utilizados para suicidarse (por ejemplo, los plaguicidas, las armas de fuego y ciertos medicamentos).

● Educar a los medios de comunicación para que informen con responsabilidad sobre el suicidio.

● Desarrollar en los adolescentes aptitudes socioemocionales para la vida.

● Detectar a tiempo, evaluar y tratar a las personas que muestren conductas suicidas y hacerles un seguimiento.

Loayza, por su parte, indica que se debe prestar atención al comportamiento de las personas que muestran tendencia hacia el suicidio.

“Si la persona está con un periodo de depresión muy fuerte por mucho tiempo, entonces tenemos que estar alertas de las ideas que tiene, al igual que si comenta ideas suicidas, lee literatura muy depresógena o tiene gustos de programas que tengan mensaje de muerte. Hay que estar atentos (…)”, sostiene.

Todas las personas, en algún momento de su vida, se constituyen en población de riesgo, más aún si tienen una psicopatología de base, un diagnóstico de enfermedad terminal, si están pasando por un evento traumático o han sufrido violencia física, sexual o psicológica por mucho tiempo, dice la académica.

Comportamiento suicida

Los comportamientos suicidas pueden ocurrir por una situación que la persona ve como agobiante, tales como el envejecimiento, la muerte de un ser querido, el consumo de drogas o alcohol, un trauma emocional, enfermedades físicas graves o dolor, el desempleo o problemas financieros, entre otros.

Un comportamiento depresógeno es el que hace referencia a un comportamiento suicida, puntualiza Liudmila Loayza.

“Si las personas se sienten con un estado de ánimo bajo, consumen alcohol, consumen drogas o alcohol, pueden derivar en ideas suicidas, de falta de sentido de la vida que desencadena en otras ideas, como el querer estar muerto (…)”, explica la académica.

Tratamiento y terapia

Es posible que las personas que están en riesgo de comportamiento suicida no busquen tratamiento por muchas razones; sin embargo, la terapia es una de las partes más importantes del tratamiento.

Si se trata de un trastorno de personalidad, lo más importante es tener una psicoterapia de tipo cognitivo-conductual. También sirve la terapia gestáltica, que habla del sentido de la vida y de tener metas o cultivar la parte espiritual del ser humano.

Para la docente universitaria, “todos tenemos que convertirnos en promotores de la salud mental, en promotores del bienestar integral de los seres humanos”.

Las personas que estén pasando por una situación mental difícil o su entorno familiar pueden buscar ayuda de profesionales de la salud mental a través de la línea de prevención del suicidio: https://www.tusaludmental.unifranz.edu.bo/ 

La plataforma de ayuda fue creada por estudiantes de las carreras de Psicología e Ingeniería en Sistemas de Unifranz, junto a instituciones públicas y privadas con el objetivo de poner a disposición de la sociedad una herramienta tecnológica que puede salvar vidas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *