Operación sonrisa: más que una cirugía, una nueva oportunidad para niños con labio fisurado

Cada sonrisa tiene una historia y, en Bolivia, miles de niños han recuperado la suya gracias a la dedicación de Operación Sonrisa. Esta iniciativa, que lleva 26 años devolviendo esperanza a familias bolivianas, brinda cirugías reconstructivas gratuitas a niños y jóvenes con labio fisurado o paladar hendido, mejorando su calidad de vida y permitiéndoles soñar con un futuro sin barreras.
Este 2025, la campaña espera beneficiar a aproximadamente 370 pacientes en sus cinco programas quirúrgicos, incluyendo el programa de marzo, que tiene como meta operar a 65 niños.
“La labor de Operación Sonrisa va más allá de la cirugía; se trata de un proceso integral que involucra evaluaciones médicas, atención especializada y acompañamiento a las familias”, informa Álvaro Ibáñez, director de la carrera de Odontología de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
Proceso de selección
Ibáñez explica que, para acceder a estas cirugías, los pacientes deben cumplir con ciertos criterios médicos. Por ejemplo, los niños con labio fisurado pueden ser operados a partir de los seis meses de edad, mientras que aquellos con paladar hendido deben esperar hasta cumplir un año.
“No hay límite de edad para recibir la cirugía, pero todos los candidatos deben estar sanos, con un peso adecuado y un nivel nutricional que garantice una recuperación postoperatoria exitosa”, explica el especialista.
Cada año, miles de niños y jóvenes reciben atención especializada, lo que ha permitido transformar más de 5.000 vidas en Bolivia. Esta labor es posible gracias al esfuerzo conjunto de profesionales de la salud, voluntarios y organizaciones que unen fuerzas por esta causa común.
Un esfuerzo conjunto entre Operación Sonrisa y Unifranz
En un esfuerzo por ampliar el impacto de esta iniciativa, la Fundación Operación Sonrisa y la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, a través de su fundación, unieron esfuerzos por esta causa común y organizan las jornadas de preselección de pacientes en la ciudad de El Alto.
«Estamos muy agradecidos porque para Unifranz ha sido fundamental la realización de estas jornadas. El apoyo logístico y humano ha permitido que lleguemos a muchas familias bolivianas que necesitan nuestra ayuda», señala Pilar Hidalgo, directora de la Fundación Unifranz.
Este sábado se llevará adelante la jornada de preselección de pacientes en la clínica Odontológica de la ciudad de El Alto (avenida del Aeropuerto) y reunirá a un equipo de médicos especialistas de Operación Sonrisa, quienes realizarán evaluaciones gratuitas para identificar a los niños que requieren cirugía reconstructiva.
«Nosotros, de forma coordinada entre la Fundación Operación Sonrisa y la carrera de Odontología de Unifranz, estamos haciendo la preselección de pacientes con esta patología. La atención es totalmente gratuita», enfatiza el director de la carrera de Odontología de Unifranz, quien asegura que la clínica ya se ha convertido en un centro de referencia para pacientes con esta patología.
Un camino de esperanza para las familias
Para las familias interesadas, es fundamental asistir a la jornada de evaluación con el paciente acompañado de su padre, madre o tutor, y portar un documento de identificación. Además, se recomienda mantener una buena alimentación y evitar resfriados para garantizar que los niños lleguen en las mejores condiciones de salud.
Cecilia Vaca, directora Ejecutiva de la Fundación Operación Sonrisa Bolivia, destaca que las cirugías reconstructivas son un paso importante para mejorar la calidad de vida, tanto física como emocional de cada uno de los pacientes.
«A quienes tienen un hijo o familiar con labio fisurado o paladar hendido, les diría que no están solos en este camino. Hay soluciones, apoyo y esperanza. Cada niño merece una oportunidad para sonreír con confianza y vivir sin barreras. Estamos aquí para ayudarles», afirma.
Operación Sonrisa no sólo cambia la vida de los pacientes, sino que también sensibiliza a la comunidad sobre la importancia de la solidaridad y la acción social.
«Nuestra misión es contribuir al bienestar de la comunidad. Unir fuerzas con Operación Sonrisa es una forma de materializar nuestro compromiso con la salud de los niños de Bolivia. Ver sus sonrisas después de recibir atención es nuestra mayor recompensa», concluye Hidalgo.
A través de este esfuerzo conjunto, cientos de niños bolivianos tendrán la oportunidad de transformar su vida, recuperar su confianza y sonreír sin miedo al futuro. Porque una sonrisa no es solo un gesto; es la puerta hacia una vida llena de posibilidades.