La Contabilidad experimenta una transformación profunda con la irrupción de la Inteligencia Artificial (IA) y la automatización. En este escenario cambiante, las instituciones educativas desempeñan un papel crucial en la formación de profesionales contadores que estén preparados para enfrentar los desafíos del mundo laboral actual.
“La adopción de nuevas tecnologías no sólo mejora el desempeño laboral de los contadores, sino que también se convierte en una herramienta fundamental para potenciar su eficacia y eficiencia”, afirma Charles Carrasco, profesional en Auditoría Financiera.
Ante este panorama, el también director de Contaduría Pública de Unifranz El Alto destaca la necesidad de formar a los nuevos profesionales con competencias tecnológicas sólidas, con la certeza de que estén equipados para enfrentar los desafíos del mercado laboral actual y sepan expandir su importancia en un entorno profesional cada vez más dinámico y tecnológicamente avanzado.
En este contexto, los contadores públicos deben desarrollar nuevas habilidades para fortalecer su importancia en el mercado laboral, éstas les permitirán aprovechar las oportunidades que ofrece la IA y superar los desafíos que plantea. Asimismo, Carrasco destaca el análisis de datos y la capacidad de explicar el razonamiento detrás de las acciones de un sistema de inteligencia simulada, como competencias que no son fácilmente reemplazables por la tecnología.
Diversos profesionales coinciden en mencionar algunas de las habilidades clave que los contadores públicos deben desarrollar en la era de la IA:
Habilidades analíticas y de resolución de problemas: la inteligencia artificial puede automatizar muchas tareas rutinarias, pero requiere que los contadores tengan habilidades analíticas y de resolución de problemas para interpretar resultados y tomar decisiones informadas.
Habilidades de comunicación y colaboración: los contadores deben ser capaces de comunicarse eficazmente con una variedad de partes interesadas, incluidas las empresas, los reguladores y el público. También deben ser capaces de colaborar con otros profesionales, como científicos de datos e ingenieros, para aprovechar las oportunidades que ofrece la IA.
Habilidades de pensamiento crítico y creativo: la IA puede generar una gran cantidad de datos, pero los contadores deben ser capaces de pensar crítica y creativamente para identificar tendencias y oportunidades.
Habilidades de aprendizaje continuo: la IA está en constante evolución, por lo que los contadores deben ser capaces de aprender y adaptarse rápidamente a las nuevas tecnologías.
Los contadores públicos que desarrollen estas habilidades estarán bien posicionados para tener éxito en la era de la IA. Estas habilidades les permitirán aprovechar las oportunidades que ofrece la tecnología y superar los desafíos que plantea.
Adaptación hacía un futuro de éxito
“El aprendizaje parte desde el modelo educativo que plantea la universidad en concordancia con el plantel docente; desde hace tres gestiones se ha invitado a profesionales en puestos estratégicos principalmente de entidades financieras e industriales, para que compartan sus experiencias y conocimiento como docentes, este aspecto ha contribuido a que nuestros estudiantes estén constantemente actualizados y sean conocedores de las habilidades actuales necesarias para incursionar al mercado laboral”, dice Carrasco.
El académico también señala que la carrera se adaptó proactivamente a los avances tecnológicos, al integrar elementos clave como la IA y la automatización. El enfoque reside en asegurar que los estudiantes estén capacitados para garantizar la transparencia de la información proporcionada por los sistemas computacionales avanzados.
“La tecnología fue y será una herramienta aliada de nuestra profesión, actualmente venimos trabajando para que nuestros estudiantes estén capacitados para garantizar la transparencia de la información proporcionada por las nuevas herramientas tecnológicas”, asegura.
Una muestra de ello es el uso de simuladores y el software contable Labsag, un sistema prediseñado en que se desarrollan habilidades contables por equipos, mediante la observación de los resultados de sus decisiones.
Los escenarios son computarizados para acelerar la adquisición de experiencia en la toma de decisiones, este aspecto fomenta el pensamiento analítico y creativo, habilidades fundamentales para los futuros contadores públicos. Es así que el enfoque de «aprender haciendo» se integra de manera sólida en la formación de los estudiantes.
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