Encuestas online: ¿Cómo funcionan y qué tan peligrosos son para tus datos?

Por Mathias Pillco
Responder encuestas en línea se presenta como una forma sencilla de ganar dinero en tu tiempo libre. Plataformas como Toluna, Swagbucks y Survey Junkie ofrecen recompensas monetarias, tarjetas de regalo y puntos que pueden canjearse por productos. En un principio, parece una solución ideal para estudiantes, amas de casa o cualquier persona que busque un ingreso extra sin mayor compromiso.
“La accesibilidad y la flexibilidad son factores clave que atraen a muchas personas, especialmente en economías en desarrollo como Bolivia, donde el acceso al trabajo formal puede ser limitado”, explica Silvia Alemán Meduiña, especialista en psicología económica.
Sin embargo, la realidad puede ser diferente a las expectativas. Muchas plataformas pagan cantidades bajas por encuesta, lo que obliga a los usuarios a dedicar largas horas para obtener una remuneración significativa. Según estudios, en promedio, una persona puede ganar entre 5 y 20 dólares al mes, dependiendo de la plataforma y la cantidad de tiempo invertido.
El costo oculto: tus datos personales
Detrás de la promesa de ganar dinero está el verdadero objetivo de estas plataformas: recolectar información valiosa sobre los consumidores para alimentar estrategias de marketing y ventas. Al registrarse, los usuarios suelen proporcionar datos sensibles como edad, ubicación, ingresos económicos o hábitos de consumo, entre otros.
César Salamanca, docente de la carrera de Publicidad y Marketing de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, señala que “el valor real no está en las encuestas, sino en los datos que las empresas obtienen de los usuarios. Es una mina de oro para las marcas, pero un arma de doble filo para los participantes si no se gestiona adecuadamente la privacidad”.
La falta de regulación en algunos países permite que las plataformas operen sin garantías claras sobre la seguridad de los datos. Esto expone a los usuarios a riesgos como:
- Robo de identidad: los datos pueden ser utilizados para cometer fraudes.
- Spam: la información compartida puede ser vendida a terceros, aumentando el riesgo de recibir correos no deseados o llamadas intrusivas.
- Filtraciones: en caso de ciberataques, los datos personales pueden ser vulnerados.
¿Cómo protegerse?
Si decides incursionar en las encuestas pagadas, es fundamental tomar medidas de precaución para evitar poner en peligro tu información. Alejandro Rodríguez, docente de la carrera de Ingeniería de Sistemas, también en Unifranz, recomienda lo siguiente:
- Investiga la plataforma: busca opiniones y verifica si la empresa tiene políticas claras de privacidad.
- Usa un correo exclusivo: crea una cuenta de correo separada para registrarte en estas plataformas y así evitar vincular tu correo principal.
- Evita compartir información sensible: no proporciones datos como números de identificación personal, cuentas bancarias o direcciones exactas.
- Lee las políticas de privacidad: asegúrate de entender cómo se utilizarán tus datos antes de aceptar cualquier término.
- Usa una conexión segura: asegúrate de realizar estas actividades desde una red confiable, preferentemente una conexión Wi-Fi privada y segura.
“Tomar estas precauciones es clave para disfrutar de los beneficios de las encuestas sin exponerse a riesgos innecesarios. En el mundo digital, la información es un recurso valioso, y debemos ser responsables con cómo la compartimos”, concluye Rodríguez.
El equilibrio entre tiempo, ingresos y riesgos
Si bien las encuestas online pueden ser una forma sencilla de generar ingresos adicionales, es importante evaluar si el tiempo invertido y los riesgos asociados justifican el beneficio económico. En un contexto global donde la protección de datos se vuelve cada vez más relevante, la responsabilidad recae tanto en las plataformas como en los usuarios.
Salamanca concluye que “en el mundo digital, los datos son el nuevo oro. Participar en encuestas puede ser una opción válida si tomas precauciones, pero siempre recuerda que lo que compartes puede tener un impacto a largo plazo”.