Día Mundial de los Futuros: imaginar hoy el mundo de mañana con visiones inclusivas
El 2 de diciembre se celebra el Día Mundial de los Futuros, una efeméride impulsada por la UNESCO desde 2021 para fomentar una cultura global de anticipación, resiliencia e inclusión frente a los desafíos que marcarán las próximas décadas.
Esta jornada se ha convertido en un espacio clave para reflexionar sobre cómo los países, las instituciones y la ciudadanía pueden transformar la incertidumbre en oportunidades a través de la prospectiva y el pensamiento estratégico, según la definición recogida en la documentación oficial del organismo internacional.
Verónica Ágreda, rectora de la Universidad Franz Tamayo (Unifranz) y presidenta del Nodo Bolivia de The Millennium Project, sostiene que proyectar el futuro es un imperativo en un mundo en constante transformación.
“Proyectar el futuro es fundamental porque nos permite anticiparnos a los cambios, comprender las tendencias emergentes y diseñar estrategias que aseguren un desarrollo sostenible e inclusivo”, reflexiona Ágreda.
Este planteamiento se alinea con la visión de la UNESCO, que destaca que la anticipación no es un ejercicio abstracto, sino una herramienta estratégica para el bienestar de las próximas generaciones.
Delinear escenarios posibles
El Día Mundial de los Futuros invita a gobiernos, organizaciones internacionales y actores de la sociedad civil a explorar metodologías de futurología que permitan delinear escenarios alternativos y más justos.
Para Ágreda, esta misión debe tener en la educación uno de sus pilares fundamentales. Desde su perspectiva, la educación del futuro debe cerrar brechas económicas, de género y étnicas, al tiempo que integra tecnologías emergentes y modelos pedagógicos capaces de preparar a estudiantes para un entorno global cambiante. Pensar en la educación del 2050, afirma, es esencial para formar profesionales capaces de responder a los desafíos de un mundo no lineal, frágil e incierto.
En este marco, el Nodo Bolivia de The Millennium Project desempeña un rol central. Según Ágreda, la institución impulsa la reflexión colectiva sobre futuros posibles y promueve la construcción de escenarios estratégicos que orienten políticas públicas y decisiones institucionales.
“La importancia de proyectar el futuro radica en nuestra capacidad de diseñarlo, de soñar y, sobre todo, de actuar en el presente para construirlo”, enfatiza la rectora de Unifranz.
Innovación social y prospectiva
Unifranz, como institución académica, también asume un compromiso activo con la construcción de futuros inclusivos. Desde programas orientados a la innovación educativa hasta su participación en redes internacionales como la Red Iberoamericana de Prospectiva (RIBER), Unifranz trabaja para consolidar una cultura de pensamiento anticipatorio en el país.
Recientemente, Unifranz organizó el Futures Week 2025, la octava versión de este evento que busca convertirse en un espacio de innovación social y prospectiva que conecta a expertos internacionales, jóvenes líderes y actores locales para imaginar y prototipar futuros posibles. En esta ocasión se prestó especial atención al eje temático “Ciudad Consciente”, que abordó desafíos como la gestión del agua, la sostenibilidad ambiental y la educación frente al cambio climático, convirtiéndose en un laboratorio ciudadano donde se diseñan soluciones colectivas para construir territorios más inclusivos y resilientes.
La versión 2025 contó con la participación de expertos internacionales de RIBER, el Tecnológico de Monterrey, Fab Lab Barcelona y Fab Lab Perú. La iniciativa “2030 Construyendo Futuros®” permitió a los participantes co-crear propuestas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, integrando talleres, paneles y laboratorios ciudadanos. Con la participación de más de 13 países y el apoyo de los tres niveles de gobierno, Futures Week 2025 se consolidó como un referente regional en innovación territorial y liderazgo juvenil.
“El futuro no se espera, se diseña”
Ágreda destaca que estas iniciativas buscan preparar a las nuevas generaciones para comprender las tendencias globales, identificar oportunidades y tomar decisiones conscientes. “El futuro no se espera, se diseña”, señala con convicción, subrayando la responsabilidad compartida de imaginar y construir un mañana más justo y sostenible.
La UNESCO ha planteado que el Día Mundial de los Futuros debe convertirse en un recordatorio anual de que los futuros posibles se construyen colectivamente. En consonancia, el trabajo desarrollado por el Nodo Bolivia de The Millennium Project refuerza la importancia de integrar la prospectiva en la toma de decisiones públicas y en la planificación académica. La construcción del futuro requiere información, reflexión y acción coordinada entre Estados, instituciones educativas y la ciudadanía.
En un contexto global marcado por crisis climáticas, transformaciones tecnológicas y tensiones sociales, pensar en el futuro ya no es una opción, sino una necesidad estratégica. Por ello, el Día Mundial de los Futuros no solo invita a imaginar lo que viene, sino a asumir el compromiso ético de diseñarlo desde hoy con visión, responsabilidad e inclusión.