Insight Lab: el espacio de Unifranz que impulsa el autoconocimiento y el aprendizaje consciente

La formación universitaria va más allá del aula. En Unifranz Cochabamba, el aprendizaje se entiende como un proceso integral donde mente, emociones y motivación se conectan para construir bienestar. Desde esa visión, el Insight Lab, gabinete psicológico de la universidad, se ha convertido en un espacio esencial para que los estudiantes aprendan a reconocerse, fortalecer su equilibrio emocional y potenciar sus habilidades académicas.
“El Insight Lab es el gabinete psicológico de Unifranz, un espacio donde los estudiantes pueden mirar hacia dentro de sí mismos, comprender sus emociones y fortalecer su bienestar. Su propósito es acompañar el proceso de formación desde una mirada humana, ayudando a que los estudiantes no solo crezcan en lo académico, sino también en lo personal y emocional”, explicó Verónica Tapias, responsable del Insight Lab.
Aprender con conciencia
En este marco, el Insight Lab organizó el taller “Métodos de estudio y estilos de aprendizaje”, dirigido a estudiantes de diferentes carreras. Su propósito fue fortalecer las habilidades de estudio y promover la comprensión de los propios estilos de aprendizaje.
El taller reunió a 31 estudiantes, en su mayoría de la carrera de Medicina. A través de pruebas diagnósticas, identificaron su estilo de aprendizaje predominante —auditivo o kinestésico— y exploraron sus inteligencias múltiples. Esto les permitió reflexionar sobre cómo mejorar la organización, el tiempo y la eficacia de sus estudios.
“El taller dejó una experiencia muy positiva. Los participantes se mostraron más conscientes de sus fortalezas y de las áreas en las que pueden mejorar. Muchos comentaron que nunca se habían detenido a pensar en cómo aprenden o qué los motiva realmente. Al finalizar, se los notó animados y con ganas de aplicar lo aprendido en su día a día académico”, señaló Tapias.
Descubrir cómo aprendemos
El taller no solo brindó herramientas prácticas, sino también una nueva forma de entender el aprendizaje. Los estudiantes comprendieron que no existe una única manera correcta de estudiar. Cada persona tiene un ritmo y una forma de procesar la información.
“Es muy importante porque no todos aprendemos igual. Algunos somos más visuales, otros más auditivos o prácticos, y saber eso nos permite aprovechar mejor nuestro potencial. Cuando el estudiante identifica su estilo, puede adaptar sus métodos y disfrutar más del proceso”, añadió Tapias.
Durante las dinámicas grupales se evidenció entusiasmo, curiosidad y compromiso. Los estudiantes participaron activamente, compartiendo experiencias y estrategias personales. El resultado fue un ambiente de colaboración y autodescubrimiento.
La voz de los estudiantes
Para Vivaldo de Oliveira Junior, estudiante de Medicina, la experiencia fue reveladora:
“Lo que más me llamó la atención fue comprender que cada persona aprende de una manera diferente. Descubrí que mi estilo combina lo visual y lo práctico, y eso me ayudará a organizar mejor mi tiempo y mis estrategias de estudio.”
Su compañera Amiel Luana Barreto coincidió en la importancia del taller:
“Me encantó darme cuenta de que no hay una forma correcta de estudiar, sino la que mejor se adapta a cada uno. Descubrí que soy visual y que los colores, esquemas y mapas mentales me ayudan a organizar ideas. Estudiar dejó de ser una obligación y se volvió una forma de crecer cada día.”
Ambos destacaron el valor de aplicar herramientas como los mapas conceptuales, las flashcards y la planificación semanal para mantener una rutina de estudio más efectiva y equilibrada.
Acompañar para transformar
El Insight Lab no solo trabaja en el desarrollo académico, sino también en el bienestar emocional y social de los estudiantes. Desde un enfoque integral, promueve talleres sobre manejo de ansiedad, autoestima, sobrecarga emocional, desmotivación y equilibrio entre la vida personal y académica.
“El objetivo es que nuestros estudiantes se sientan acompañados y comprendidos. No se trata solo de rendir bien en clases, sino de aprender a cuidarse, reconocer sus límites y desarrollar hábitos saludables que los preparen para la vida profesional y personal”, concluyó Tapias.