Bolivia, el destino elegido por jóvenes peruanos para cumplir el sueño de ser profesionales
Por Andres Zankis

Desde muy joven, Víctor Aguirre sintió la vocación de brindar atención a niños, adultos mayores y personas que sufren abandono familiar, a través de la Enfermería. Con solo 21 años y la fuerte convicción de convertirse en un profesional de talla mundial, dejó su natal Perú para trasladarse a la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, en Santa Cruz, Bolivia, para potenciar sus conocimientos y don de servicio.
“Cada día me enamoro más de mi carrera, porque puedo ayudar a las personas que más lo necesitan y realmente me emociona mucho. Lo que más disfruto de mi intercambio internacional, es que puedo conocer de cerca un sistema de salud diferente al de mi país y aprender de ambas realidades”, destacó Aguirre.
En su familia, Víctor no es el único con vocación hacia la salud. Su tía, Laura Guamán, es también profesional de la salud en el campo de la Enfermería, y su influencia ha sido clave en su decisión de seguir este camino. Inspirado por ella, Víctor decidió postular al programa de intercambio académico de Unifranz, convencido de que le permitiría adquirir nuevos conocimientos y enfrentar retos que enriquecerían su formación.
«Lo que más me ha gustado de Unifranz son sus centros de simulación y las enseñanzas nuevas que estoy aprendiendo. Tuve la oportunidad de realizar prácticas tanto dentro como fuera de la universidad, como en la Caja Petrolera, donde observé procedimientos quirúrgicos, lo que me permitió consolidar mis conocimientos teóricos con experiencias reales del ámbito de la salud”, resaltó el joven.

Patricia Avilés, directora de la carrera de Enfermería en Unifranz Santa Cruz, calificó de importante el intercambio. “Esta experiencia contribuye en su formación como profesionales de clase mundial y los prepara para nuevos desafíos en el área de la salud. Además, crearán relaciones con especialistas y estarán en contacto con profesionales que dirigen clínicas y distintos centros médicos de alto prestigio”.
Avilés señala que la internacionalización de la carrera de Enfermería no solo enriquece los procesos de enseñanza y aprendizaje, sino que también potencia el crecimiento personal de los estudiantes al estar lejos de su hogar y asumir nuevas responsabilidades.
Para Víctor, este intercambio también le ha permitido descubrir nuevas culturas. En cuanto a su futuro, se ve a sí mismo como un enfermero más humano, compasivo y dispuesto a ayudar a los demás a través de un aprendizaje más didáctico. Para él, las tres principales características que debe tener un buen licenciado en Enfermería son: el amor hacia sus pacientes, la creatividad y la honestidad.
Este intercambio no solo es una experiencia educativa, sino también un paso significativo en el proceso de internacionalización de la carrera de Enfermería en Unifranz, consolidándose como un ejemplo de cómo la movilidad estudiantil abre puertas a nuevas oportunidades para los futuros profesionales de la salud. Con esta formación global, Víctor Aguirre y muchos otros estudiantes podrán enfrentarse con éxito a los retos de un mundo cada vez más interconectado y diverso.