¿Cómo proteger el valor de tus ahorros en tiempos de incertidumbre?

Por Aldo Juan Peralta Lemus

Imagen de Unifranz

En un contexto económico de cambio, proteger el valor del dinero se ha vuelto una prioridad para muchas personas. No solo es una medida de precaución, sino una forma inteligente de construir seguridad y bienestar. Lejos de ser una tarea compleja, proteger el valor del dinero y hacerlo crecer es posible con pequeñas decisiones bien pensadas, que cualquier persona puede practicar.

Orlando López, economista y docente de la carrera de Ingeniería Económica de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, sostiene que existen opciones para las personas de diferentes tipos de ingreso económico, sin embargo, advierte que las personas deben informarse “muy bien” antes de realizar cualquier operación.

“Definitivamente, tenemos que buscar instrumentos financieros que mantengan el valor de nuestro dinero. En este momento no podemos confiarnos en solo ahorrar en bolivianos”, destaca López. 

Mantener el valor del dinero en tiempos de incertidumbre implica protegerlo contra la inflación, la devaluación monetaria y la volatilidad del mercado, porque pueden erosionar silenciosamente el poder adquisitivo, por lo que es esencial buscar instrumentos financieros que al menos igualen o superen el ritmo inflacionario. El primer paso es evitar dejar el dinero «dormido» en cuentas de bajo rendimiento o bajo “el colchón”.

Monedas estables

Invertir en monedas estables, especialmente en contextos de inflación o devaluación, se ha convertido en una estrategia clave para preservar el valor del dinero. En tiempos inestables, los activos refugio como las divisas extranjeras estables también ganan protagonismo por su histórica capacidad de conservar valor. 

“Lo que se puede hacer es: comprar dólares o dólares digitales. Siempre, una porción de lo que les quede después de los gastos”, sostiene López. 

Un informe del Banco de Pagos Internacionales (BIS, 2023) destaca que las stablecoins (monedas estables) vinculadas a monedas fuertes (como el dólar o euro) son una herramienta para preservar el valor en países con alta inflación o devaluación, aunque conllevan riesgos regulatorios y de contraparte.

Las divisas, como el dólar estadounidense o el euro, suelen mantener una mayor estabilidad frente a las monedas locales de economías vulnerables o inestables. Al cambiar parte del capital a monedas fuertes, se evita que el poder adquisitivo se diluya con el tiempo, lo que brinda una mayor sensación de seguridad financiera.

Además, las monedas estables ofrecen una ventaja importante: son ampliamente aceptadas a nivel internacional. Esto permite no solo proteger el valor del dinero, sino también tener mayor libertad para realizar transacciones globales, invertir en mercados extranjeros o simplemente planificar viajes, estudios o negocios en el exterior sin preocuparse por la volatilidad de la moneda local.

Inversión en Bienes y Raíces 

Demis Vargas, también docente de la carrera de Ingeniería Económica de Unifranz, destaca que existen diferentes formas de proteger el dinero para que este no pierda su valor. La más efectiva es invertir en bienes tangibles como propiedades o terrenos. Según Vargas, estos requieren mayor capital inicial, pero estos activos tienden a aumentar su valor con el tiempo, especialmente en períodos de inestabilidad.

“Si hablamos puntualmente de inversiones, el mejor refugio hoy en día siempre va a ser los bienes, principalmente los bienes inmuebles, porque la característica de los bienes inmuebles es que van valorizando en el curso del tiempo”, explica el académico.

Un informe del Journal of Real Estate Finance and Economics en 2023, indica que las propiedades en mercados emergentes pueden generar una plusvalía anual del 10 al 20%, dependiendo de la ubicación y el desarrollo urbano. La inversión en bienes raíces se consolida como una estrategia sólida para generar estabilidad, seguridad financiera a largo plazo con los siguientes beneficios:

  • Plusvalía a largo plazo: Los bienes raíces tienden a aumentar su valor con el tiempo, generando ganancias significativas al vender. Factores como la ubicación, el desarrollo de la zona y la demanda influyen en esta apreciación.  
  • Ingresos pasivos a través de alquileres: Se puede invertir en distintos tipos de inmuebles (viviendas, terrenos, oficinas, naves industriales) con diferentes presupuestos. Alquilar este tipo de propiedades, genera un flujo constante de ingresos, ideal para generar la estabilidad financiera.  
  • Protección contra la inflación: Los bienes raíces tienden a mantener o aumentar su valor en períodos inflacionarios, protegiendo el poder adquisitivo y los ahorros.

En Bolivia las zonas con mayor plusvalía, o mejores opciones de valorización de las propiedades, son las ciudades con mayor población como: La Paz y Santa Cruz de la Sierra. Este último, según Economy (revista digital), es el motor del crecimiento económico y la plusvalía inmobiliaria en Bolivia. 

En cuanto a plusvalía, zonas comerciales y barrios residenciales exclusivos como Equipetrol, Urbarí, Sirari y Las Palmas presentan los precios de terreno más altos, con valores que pueden alcanzar hasta 2.000 dólares por metro cuadrado en avenidas principales. Sin embargo, en la zona norte de Santa Cruz, incluyendo zonas como Warnes y Montero, se proyecta como uno de los lugares de mayor crecimiento industrial.  

De esta manera el mercado inmobiliario brinda múltiples opciones de inversión adaptadas a distintos perfiles, desde quienes compran para revender a corto plazo, hasta quienes buscan construir un patrimonio. 

Cuidar el dinero hoy es proteger el futuro. Y aunque no hay fórmulas mágicas, informarse, actuar con prudencia y mantenerse actualizado son las mejores herramientas para que los ahorros sigan cumpliendo su propósito: ofrecer seguridad, oportunidades y libertad.

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Aldo Juan Peralta Lemus

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