10 beneficios de aprender un segundo idioma en un mundo globalizado

En un mundo cada vez más interconectado, el aprendizaje de un segundo idioma se convirtió en una herramienta esencial para destacar en el ámbito laboral, académico y personal. Eduardo Pinell, director del Centro de Idiomas de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, resalta que “la capacidad de comunicarse eficazmente en diferentes idiomas se ha vuelto indispensable en un mercado globalizado donde las habilidades lingüísticas abren puertas a nuevas oportunidades”.
El Atlas Mundial de las Lenguas de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) revela que hay unas 7.000 lenguas en uso, habladas o signadas, en todo el mundo. Y se calcula que al menos la mitad de la población del planeta es bilingüe y se desenvuelve en la vida cotidiana al menos en dos lenguas o dialectos.
Asimismo, desde el auge del teletrabajo hasta la interacción con empresas internacionales, hablar un segundo idioma permite ampliar horizontes profesionales y establecer conexiones laborales significativas. «Las plataformas digitales nos han dado la posibilidad de trabajar para empresas en cualquier parte del mundo, pero la comunicación fluida es clave para el éxito», añade Pinell.
“La lengua es más que una herramienta de comunicación, es una facultad cognitiva humana muy específica y el fundamento común a toda la humanidad. Permite transmitir experiencias, tradiciones, conocimientos e identidades de una generación a otra”, detalla la UNESCO.
Los beneficios no se limitan al ámbito profesional. Numerosos estudios demostraron que aprender un segundo idioma tiene impactos positivos en la salud mental, la memoria y la creatividad.
Además, permite desarrollar una mayor sensibilidad hacia otras culturas, enriqueciendo la visión del mundo. Pinell subraya que “dominar múltiples idiomas no solo mejora nuestras competencias, sino que nos conecta con nuevas experiencias culturales”.
Algunos estudios destacan su aporte en la prevención de enfermedades neurodegenerativas y la mejora de la autoestima, esta habilidad demuestra ser mucho más que una simple herramienta comunicativa.
Pinell identifica 10 beneficios de aprender un segundo idioma, respaldados por investigaciones recientes y por la experiencia de expertos en el área:
1. Previene la demencia
Hablar dos o más idiomas de manera habitual puede retrasar el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer hasta en cinco años, según la Academia Americana de Neurología. Esto se debe a que el uso constante de varias lenguas crea nuevas vías nerviosas en el cerebro, fortaleciendo su capacidad de procesamiento.
2. Mejora las habilidades matemáticas
Estudios realizados por la Universidad de Massachusetts y la Universidad de Michigan demostraron que los niños que aprenden una lengua extranjera tienen mejor rendimiento en matemáticas. La práctica semanal de un idioma complementario desarrolla habilidades analíticas y de resolución de problemas.
3. Aumenta el volumen del cerebro
Estudios concluyeron que el bilingüismo incrementa el grosor del hipocampo, la región del cerebro responsable de la memoria y los estados emocionales. Este crecimiento cerebral mejora las habilidades cognitivas y contribuye al desarrollo mental general.
4. Potencia la creatividad
Hablar otro idioma obliga a comprender y utilizar estructuras gramaticales diferentes, lo que estimula el pensamiento creativo. Según la Cerebrum Dana Foundation, las personas multilingües tienden a encontrar soluciones innovadoras con mayor facilidad.
5. Afina el oído
El aprendizaje de idiomas desarrolla una mejor percepción auditiva, ya que requiere captar sutilezas en la pronunciación y entonación. Esto no solo beneficia la comunicación verbal, sino que también mejora la capacidad de escuchar y comprender en general.
6. Aumenta la autoconfianza y la toma de decisiones
El dominio de una lengua extranjera eleva la autoestima al permitir a las personas comunicarse en diferentes entornos. Además, la neurociencia sugiere que quienes hablan más de un idioma toman decisiones de manera más eficiente y segura.
7. Mejora la memoria
El aprendizaje de idiomas implica ejercicios mentales que mejoran la capacidad de retención. Desde vocabulario hasta estructuras gramaticales, esta práctica constante optimiza la memoria a largo plazo y la capacidad de recordar detalles cotidianos.
8. Incrementa la atención
Investigaciones de la Universidad de York y la Universidad Pompeu Fabra señalan que las personas bilingües tienen un mayor control de atención. Esto significa que pueden concentrarse mejor en tareas importantes y adaptarse más rápidamente a cambios en sus actividades.
9. Enriquece el conocimiento de la lengua materna
Aprender una segunda lengua permite comprender mejor las estructuras y reglas de la lengua nativa. Como expresó el escritor Geoffrey Willans: «Nunca se puede entender una lengua hasta que se comprendan al menos dos».
10. Facilita el acceso a otras culturas
Dominar un idioma extranjero es una ventana hacia la cultura que lo representa. Conocer su historia, costumbres y valores amplía la perspectiva personal y fortalece la conexión con personas de otros contextos culturales.