Cuadragésima promoción de profesionales de Unifranz Santa Cruz
Con una atmósfera cargada de emociones, sueños cumplidos y nuevos comienzos, la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, sede Santa Cruz, celebró su cuadragésima colación de profesionales, una ceremonia que reafirmó su compromiso con la formación de líderes transformadores, capaces de innovar y responder a los desafíos de un mundo en constante cambio.
La ceremonia estuvo marcada por momentos de profunda emoción y alegría, reflejo del esfuerzo compartido entre estudiantes, familias y docentes que acompañaron este proceso de formación. Los nuevos profesionales, demostraron no solo excelencia académica, sino también una fuerte vocación de servicio, liderazgo, carisma y compromiso con la sociedad.
Aylen Cabrera Baldelomar, graduada de la carrera de Bioquímica y Farmacia, fue elegida como valedictora de esta promoción. En su inspirador discurso, sus palabras resonaron como un llamado a no conformarse, a soñar en grande y actuar con propósito.
“Hoy cerramos una etapa que ciertamente no es el final, sino el comienzo de algo más grande. Porque la Universidad Franz Tamayo no nos preparó para un mundo perfecto, sino para transformar el imperfecto. Nos enseñó que detrás de cada dificultad hay una oportunidad”, expresó Cabrera.
Aylen Cabrera Baldelomar es la graduada con el promedio más alto de la cuadragésima promoción de profesionales de Unifranz Santa Cruz
Durante el acto, Verónica Ágreda, rectora nacional de Unifranz, resaltó el papel de las familias en este logro colectivo y se dirigió con especial gratitud a los estudiantes internacionales que forman parte de la comunidad universitaria.
“Sabemos lo orgullosas que están las familias, porque este logro es también de ustedes. Y porque incluso en tiempos de crisis, siempre hay un espacio para construir algo valioso. A nuestros graduados internacionales, gracias por confiar en esta ciudad y enriquecerla con su presencia. El futuro es suyo y los espera”, expresó la autoridad académica.
Uno de los aspectos más destacados de la colación fue la diversidad cultural que caracteriza a Unifranz. Jóvenes de diferentes países eligieron a Santa Cruz como el lugar donde forjar su futuro profesional, reafirmando el carácter internacional y abierto de la universidad, que se proyecta como una institución que genera oportunidades desde Bolivia para el mundo.
Esta ceremonia no solo fue un cierre de ciclo, sino un punto de partida. Cada toga lanzada al cielo simbolizó un sueño que despega, una promesa de compromiso con el entorno, una voz que se suma a las múltiples causas que hoy demandan innovación, empatía y acción decidida.
