Por Manuel Filomeno
Las Olimpiadas Universitarias de Unifranz concluyeron entre aplausos y vítores, destacando el talento deportivo de los estudiantes de sus cuatro sedes de la Universidad Franz Tamayo, y fortaleciendo los lazos de amistad y camaradería entre los participantes.
“Estas olimpiadas fueron una oportunidad para fomentar el deporte y, sobre todo, para conocernos y unirnos más allá de nuestras sedes, fortaleciendo los lazos entre todos”, explicó John Sebastián Elorria Castedo, medallista en la disciplina Fútbol de la sede Cochabamba.
Durante tres días, cerca de 400 deportistas de las cuatro sedes de Unifranz: La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz, compitieron en 10 disciplinas en diferentes escenarios deportivos, emocionando a las barras que los siguieron en cada evento.
Fútbol, futsal, baloncesto, voleibol, tenis de mesa, spartan race (carrera de obstáculos), ajedrez, danza, teatro y pádel fueron las disciplinas en las que los deportistas estudiantiles dejaron todo de sí y, mediante su esfuerzo, llenaron de orgullo a sus respectivas sedes.
“Estoy sorprendido y agradecido con todas las sedes, que trajeron a su mejor gente para competir y hacer de este evento algo bonito. Espero que esto se repita y que se generen más actividades con los deportistas”, expresó por su parte Rodrigo Junior Giménez Dávila, capitán de la selección de futsal de la sede La Paz.
Ganadores
Según el reglamento, solo contaron en la tabla final los eventos en los que participaron las cuatro sedes, excluyendo algunas disciplinas donde solo habían participado entre dos a tres sedes (tenis de mesa, ajedrez y básquetbol).
Unifranz La Paz se alzó con el liderazgo deportivo con tres medallas de oro y tres de plata. Cochabamba logró dos de oro, una de plata y tres de bronce; El Alto sumó una de oro, una de plata y dos de bronce, mientras que Santa Cruz, aunque no consiguió medallas de oro, obtuvo una de plata y una de bronce.
En las tres disciplinas que salieron de la tabla final, Cochabamba obtuvo 6 medallas de oro, dos de plata y una de bronce, mientras que La Paz consiguió 2 de oro, 5 de plata y una de bronce; El Alto se alzó con dos de bronce y Santa Cruz no participó en las disciplinas fuera de competición.
El acto de clausura reunió a todos los deportistas y a sus barras en una ceremonia en la que autoridades de la universidad e invitados especiales impusieron las medallas a los ganadores, entre la algarabía de la concurrencia.
Una oportunidad de unirse en el deporte
Verónica Ágreda, rectora de Unifranz, resaltó la importancia de los juegos, como una oportunidad de unión entre deportistas en un marco de respeto y trabajo en equipo
“En un mundo que enfrenta tantos desafíos, las olimpiadas son un recordatorio de lo poderosos que podemos ser juntos, aquí, no hay divisiones políticas ni ideológicas, solo hay respeto, trabajo en equipo, un deseo común de alcanzar lo extraordinario”, expresó.
De la misma manera, la autoridad académica indicó que cada deportista es un embajador de su comunidad e instó a los participantes a trabajar de manera colectiva para alcanzar la victoria, pero también un mundo más justo.
“Invito a cada uno de ustedes, tanto dentro como fuera del estadio, a ser embajadores de estos valores en sus comunidades. Que cada carrera, cada salto, cada gol, cada canasta, sea un símbolo del esfuerzo colectivo, por un mundo más justo, inclusivo y lleno de oportunidades”, expresó.
Estos valores iniciales fueron recogidos por los estudiantes-deportistas, que se enfrentaron con respeto y camaradería, generando vínculos y lazos que no se romperán a pesar de la distancia geográfica que los separa.
“Estoy muy contento de haber participado. Agradezco la oportunidad de haber sido parte de esta hermosa actividad que organizó la universidad y muy feliz de haber ganado en nuestra categoría como sede. Estos juegos han sido magníficos, hemos tenido una convivencia genial donde hemos llegado a conocer a personas de distintas disciplinas y eso me deja muy contento”, expresó Harold Paredes, capitán del equipo de futsal de la sede La Paz.
Por su parte, la deportista Isabel Chacón, miembro del equipo de voleibol damas de la sede Cochabamba, indicó que la práctica del deporte no solo nos forma en valores, sino que también nos permite conocer a gente afín y formar relaciones que trascienden el tiempo y la distancia.
“El deporte es lo más lindo de la vida, porque no solo nos enseña resiliencia y un montón de otros valores, sino que además conoces a mucha gente, que no solo se vuelve amigo, sino también familia”, apuntó.