Por Manuel Filomeno
Estar sin estar en un lugar, el metaverso y sus experiencias nos ofrecen un mundo sin restricciones, en el que las barreras físicas pueden ser rotas y podemos interactuar con el entorno en base a nuestras preferencias. Algo inimaginable hasta hace poco y solo al alcance de la ciencia-ficción que se nos muestra en las películas.
Cuando hablamos de explorar sin restricciones, era cuestión de tiempo que la incorporación de los destinos turísticos al metaverso se iniciara mientras el sector reflexiona de qué forma puede afectar o qué papel va a jugar en el futuro la inteligencia artificial.
El metaverso ha sido bautizado como un nuevo capítulo de la internet, un modo virtual en el que las personas se conectan mediante herramientas virtuales, pudiendo personalizar sus aspectos físicos a través de lo que denominamos avatares.
Muchos destinos ya forman parte de diferentes mundos virtuales, al ser elegidos escenarios de videojuegos inmersivos donde los usuarios interaccionan en entornos urbanos o naturales de esos destinos, generalmente, caracterizados por su fama o importancia.
En el caso de los videojuegos, la industria ha ido recreando entornos urbanos de inmersión desde el inicio de su historia basados en ciudades que, como decimos, son importantes destinos turísticos, como puede ser el caso de Nueva York, París o Barcelona.
Así, casi sin darnos cuenta hemos ido viendo como la recreación de lugares y monumentos mundialmente conocidos se han ido representando con mayor rigor en los videojuegos, no sólo para experimentar vivencias interactivas ambientadas en la actualidad, sino también para experimentar la sensación de vivir en otras épocas pasadas mediante recreaciones históricas, ofreciendo viajar en el tiempo.
En el informe “El metaverso y el alma: viaje al próximo desafío del Turismo”, realizado por las cámaras turísticas españolas Segittur y Turium, los expertos consultados señalaron que “el metaverso en todas sus formas tiene un potencial enorme en educación y en turismo, abriendo grandes oportunidades. Y, como cualquier tecnología, entraña sus riesgos, que solo pueden prevenirse y disminuir a su alcance a través de una buena gestión y normativa de uso social, del mismo modo que existen leyes para regular la convivencia en el mundo físico real”.
Algunos ejemplos de experiencias en el metaverso en el sector turístico son:
- Benidormland: La localidad de Benidorm ha dado un salto al Metaverso. Han creado una web para que los usuarios de todo el mundo puedan pasear por las calles de la ciudad, adentrarse en los enclaves turísticos e incluso en establecimientos como hoteles o parques temáticos. Los usuarios podrán conocer la ciudad antes de viajar para inspirarse y aprender sobre el lugar. A partir de Mayo se podrá acceder a través de la plataforma Six3D.
- Hotel Madrid Marriott Auditorium: Este hotel alberga uno de los mayores espacios para reuniones y eventos. Su presencia en el Metaverso permitirá a los organizadores de eventos visitar las instalaciones, ver eventos anteriores y planificar y personalizar la estancia sin tener que desplazarse.
- Ofrenda de flores virtual (Zaragoza): Zaragoza se ha convertido en la primera ciudad española en digitalizar su fiesta popular, llegando a recibir 360.000 visitas virtuales.
Bolivia apuesta por el metaverso
A través de un recorrido virtual, turistas y curiosos de todos los rincones del mundo pueden aprender sobre los atractivos turísticos que ofrece Bolivia, además de su gastronomía, incluyendo descripciones de los ingredientes y recetas de los principales platillos del país. Todo esto gracias a un entorno virtual creado en el metaverso por estudiantes universitarios.
“Tenemos un centro de convenciones virtual, cada una de las paredes está cubierta con paneles respecto de lo que son los diferentes atractivos turísticos de las diferentes regiones y al tocar la lupa nos describe estos atractivos y los platos típicos de cada región, junto a sus recetas. Cuando los turistas nos visiten, promocionar este metaverso va a ser sumamente importante, de manera que el visitante, va a saber que escoger, va a saber qué preguntar y eso permitirá también promocionar nuestros productos”, explica Patricia Guerra, docente de la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
Guerra indica que esta iniciativa fue elaborada por sus estudiantes, de tres opciones: un centro de promoción de la universidad, una galería de arte virtual y un muestrario de la gastronomía del país.
“Sin embargo, uno de los aspectos fundamentales que se tomó en cuenta es que la gastronomía en nuestro país es bastante diversa y esa diversidad es importante hacerla llegar a través de una plataforma que este abierta las 24 horas del día y que además puede, con una buena promoción, lograr la participación un gran número de turistas que llegan a nuestro país, por lo que se constituye en una herramienta de información antes y en el momento de su llegada”, agrega.
Tendencias mundiales
“Durante la pandemia hemos vivido con mayor fuerza lo que es el desplazamiento de las inteligencias virtuales y digitales y prácticamente una de las industrias más afectadas por esto fue la organización de eventos”, señala la experta
Esto obligó a los organizadores de eventos a capacitarse y acercarse a las herramientas digitales.
Por ejemplo, en septiembre de 2020, en plena pandemia de la Covid-19, se realizó en el país el Primer Encuentro Virtual de Turismo Sustentable y Productos Turísticos, lo que fue la primera plataforma virtual de generación presencial que permitió que la participación de personas de varios países del mundo, logrando también con esto que muchos la presentación de panelistas de alta jerarquía en el evento, realizado íntegramente en el metaverso.
En esa oportunidad también participaron cerca de 55 empresas de productos turísticos.
“Bolivia como promotor de esta situación fue realmente pionera a nivel latinoamericano y a partir de esta experiencia empezamos a crear muchísimo más conocimiento respecto de herramientas digitales y empezamos a perfeccionar su uso, de manera que sirvan, no solamente a nivel empresarial sino también a nivel estudiantil, para que puedan llegar algunas iniciativas de proyectos”, dice Guerra.
“En este sentido y conociendo que lo clásico de la organización de eventos siempre va a existir como pilar fundamental, es importante avanzar también en la capacitación de lo que implican las nuevas tendencias y fundamentalmente, aplicar aquellas que van a seguir funcionando y este el caso del metaverso”, acota.
La experta indica que, actualmente existen una infinidad de plataformas que permiten crear entornos virtuales en el metaverso, algunas muy sencillas y básicas, otras más complejas y completas.
“Existen muchísimas plataformas, desde las más básicas y sencillas, con menos o más tecnología, hasta plataformas que simulan una presencialidad total. En este caso, hemos arrancado con una herramienta muy interesante y completa y al mismo tiempo muy fácil de personalizar, de manera que los visitantes, puedan al mismo tiempo informarse, establecer actividades lúdicas que los complementen en ese contexto”.
Guerra explica que es importante que los elementos digitales y virtuales incorporen lo lúdico, aquello que sea atractivo y que pueda penetrar más en la mente del consumidor, para poder trabajar de una manera más tranquila y alegre.
Sin embargo, la experta reconoce que lo presencial sigue siendo la parte más importante de la organización de eventos.
“Las herramientas digitales deben ser la tendencia, si bien la propuesta y consigna durante la pandemia fue considerar los eventos virtuales, sabíamos que en algún momento retornaríamos para poder generar eventos híbridos y esa es la tendencia hoy en día. Lo híbrido no se irá del mundo, se ha convertido en una oportunidad y a esto se sumarán todo lo que son hologramas, metaversos desarrollados de manera que la presencialidad sea cada vez mucho más real dentro de universos totalmente virtuales”.