Por Manuel Filomeno
Ante la falta de dólares en el mercado, algunos negocios han empezado a aceptar métodos alternativos de pago como giftcards (tarjetas con montos preestablecidos para comprar en tiendas digitales), tarjetas de crédito prepagadas o pagos a través de pasarelas como PayPal para la compra de bienes y servicios.
“Nosotros aceptamos pagos en bolivianos, pero también en estos otros métodos de pago si son posibles, ya que así podemos seguir costeando las importaciones que realizamos”, explica Jorge Valle, propietario de una tienda de artículos de colección.
Según Orlando López, economista financiero especializado en gestión de riesgos y docente de la carrera de Ingeniería Económica de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, estos métodos alternativos de pago permiten a los negocios operar en dólares, sin contar con la divisa de forma física, ya que las giftcards y tarjetas de crédito prepagadas funcionan como dinero real en la economía digital.
“En muchos lugares del mundo se pueden realizar pagos con tarjetas de páginas como Amazon o Ebay, ya que estas funcionan como dinero real en esas tiendas y además se pueden intercambiar por dinero físico, en el caso de las tarjetas de crédito prepagadas es aún más simple, ya que estas tienen un monto fijo asignado previamente, el cual se puede usar para realizar compras en puntos de venta, por internet o depositar los fondos en pasarelas de pago internacionales”, explica el experto.
Sobre las tarjetas prepagadas, López explica que estas son tarjetas que se pueden solicitar en distintas páginas previo depósito del monto necesario más una comisión y que luego son enviadas por correo al solicitante. En algunos casos estas tarjetas pueden ser usadas de manera digital y, al estar asociadas a redes de pago electrónico mundiales, pueden ser utilizadas en casi cualquier cajero automático o POS (punto de venta).
“Una tarjeta prepagada no está ligada a una cuenta de banco o cooperativa de crédito. En vez de eso, usted deposita dinero en la cuenta de la tarjeta, lo cual a veces se denomina cargar dinero en la tarjeta, antes de poder gastarlo”, agrega el experto.
Con estas tarjetas los negocios pueden reponer mercadería o realizar pagos a proveedores en el extranjero de manera directa, sin tener que comprar dólares u otras divisas.
Pasarelas de pago
Sebastián Castro, dueño de una tienda de productos electrónicos anuncia en sus redes que compra “saldos” de cuentas de PayPal, los cuales paga en bolivianos a un tipo de cambio preferencial. También acepta pagos directos a través de la pasarela de pagos.
“Compro los saldos, que a veces son unos pocos dólares o a veces son cantidades mayores ya que eso me permite tener dinero en mi propia cuenta de PayPal para poder pagar a mis proveedores, de otra manera tendría problemas para realizar esas transacciones”, explica el comerciante.
Algunas pasarelas y plataformas de pago (como PayPal) no funcionan directamente en Bolivia, sin embargo, existen maneras de depositar montos y realizar pagos a través de ellas.
“Pero, debido al tema de los dólares y a las restricciones para las compras en internet que tienen los bancos se ha hecho más difícil ‘cargar’ la cuenta que tengo, no puedo depositar en mi propia cuenta, entonces compro el saldo que tienen otras personas en la plataforma, que me depositan lo que tienen a cambio de un producto o también les puedo pagar en bolivianos a un muy buen tipo de cambio”, explica el emprendedor.
Otro método de pago alternativo, aunque con menor llegada, son las criptomonedas.
“En mi tienda se puede pagar con efectivo, tarjeta y cripto, aunque solo estoy aceptando pagos por montos pequeños y solo en bitcoin, ether o USDT (tipos de criptomonedas). Para esto tengo que estar muy atento a la cotización del día, hasta ahora solo he hecho un puñado de transacciones”, comenta Valeria Terceros, propietaria de una tienda de celulares.
López apunta que el uso de las cripto aún no despega en el país, debido a la falta de conocimiento de su funcionamiento y de confianza en su valor.
“Aún no existe la confianza necesaria para que las criptomonedas sean aceptadas como un método de pago masivo, hay algunos negocios que los usan, porque conocen los riesgos y las oportunidades que estas plantean”, expresa López.