Por Manuel Filomeno
El dolor de la artritis reumatoide puede ser insoportable, sobre todo en las manos, impidiendo la función normal de las articulaciones. Diversos tratamientos existen y pueden ser utilizados por las personas que padecen de esta enfermedad, pero a altos costos. Tomando en cuenta esta problemática, un grupo de estudiantes desarrollaron una crema antiinflamatoria en base a cúrcuma, que alivia los síntomas de manera no invasiva.
La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune crónica que afecta principalmente a las articulaciones. Se caracteriza por la inflamación dolorosa que puede llevar a la deformidad y pérdida de función de las articulaciones.
“Nuestro proyecto es una crema antiinflamatoria que puede servir para tratar varias condiciones, pero nosotros nos hemos basado principalmente en la artritis reumatoide, un problema de salud que afecta sobre todo a personas mayores. Estas personas mayores no tienen una buena adherencia a los medicamentos que se les proporcionan y nosotros hemos optado por crear esta crema a base de cúrcuma”, explica Luz Araceli Alegre Apaza, estudiante de octavo semestre de la carrera de Bioquímica y Farmacia de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
La crema, desarrollada por Alegre junto con Geovanna Lozano Mamani, Marleni Mamani Huasco y Melissa Massiel Machaca Méndez forma parte de los proyectos integradores, una metodología educativa que propone soluciones innovadoras a problemas reales.
Alegre indica que se escogió la cúrcuma (cúrcuma longa linn), un rizoma (tipo de tallo subterráneo que crece horizontalmente y emite raíces y brotes desde sus nudos) para la elaboración de la crema debido a sus conocidas propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y analgésicas.
“Este rizoma posee propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y anticancerígenas, pero nos hemos enfocado en su efecto antiinflamatorio. Para ello, extrajimos, secamos, molimos y maceramos el rizoma, y luego incorporamos su extracto a la crema utilizando técnicas científicas”, expresa la estudiante.
Se decidió utilizar las propiedades de esta planta, que, si bien no es nativa de Bolivia, es cultivada de manera importante en diversas zonas, en forma de crema, debido a la facilidad de su aplicación, permitiendo su acción de manera directa y sin efectos secundarios, explica Alegre.
La artritis reumatoide afecta la calidad de vida de los pacientes y pone en mucho estrés los sistemas de salud, especialmente en áreas con recursos limitados como El Alto. El extracto hidroalcohólico de cúrcuma, rico en curcuminoides, tiene potentes propiedades antiinflamatorias. Su formulación en crema tópica permite una aplicación directa y efectiva, reduciendo inflamación, y dolor sin efectos secundarios sistémicos.
Motivación
Las estudiantes responsables del proyecto señalan que su motivación para formular esta crema provino de sus familiares y conocidos que padecen de artritis reumatoide y que no han tenido mucha suerte con los tratamientos tradicionales, debido al alto costo de estos.
“Nosotros conocíamos la artritis reumatoide como patología, pero también tenemos familiares y conocidos que tienen esta condición y que son tratados con medicamentos costosos y que a la gran mayoría de la población no llegan. Por otra parte, en el campo se conoce la cúrcuma y sus aplicaciones, pero no se utiliza de manera correcta o en las concentraciones correctas”, explican.
Marleni Machaca, por su parte, espera que este proyecto apoye en la investigación de las propiedades de la cúrcuma y de otras plantas con usos medicinales para su aplicación en productos con altos estándares de calidad que mejoren las vidas de los habitantes del país.
“Actualmente la cúrcuma se utiliza por utilizar, pero nosotros hemos investigado más a fondo acerca de sus propiedades y hemos visto que tiene una infinidad de propiedades entonces se nos ha ocurrido aplicarlas en una crema, esperamos poder seguir investigando y encontrando nuevos usos para esta y otras plantas”, apunta.