Un ensayo clínico aleatorio de prueba de concepto, realizado en Estados Unidos durante 2022, concluyó tentativamente que el reemplazo del hábito es una estrategia de autoayuda factible y eficaz contra conductas repetitivas centradas en el cuerpo (BFRB por sus siglas en inglés), como pellizcarse la piel o morderse las uñas.
“El reemplazo del hábito de autoayuda es prometedor para reducir los BFRB pero no los síntomas concomitantes”, se indica en el reporte del ensayo (19 de julio de 2023), donde se reconocen algunas limitaciones, como la falta de evaluación externa, ausencia de diagnósticos verificados y falta de datos de seguimiento.
Los comportamientos repetitivos centrados en el cuerpo, como pellizcarse la piel, abarcan un conjunto de condiciones en la interfaz de la dermatología y la psiquiatría y psicología. El trastorno es frecuente, pero actualmente no se diagnostica ni se trata adecuadamente.
“El presente ensayo clínico aleatorizado de prueba de concepto demuestra tentativamente que el reemplazo del hábito es una estrategia de autoayuda factible y eficaz contra los BFRB, especialmente para morderse las uñas. Las limitaciones del estudio incluyen la falta de evaluación externa y diagnósticos verificados. Además, al estudio le faltan datos de seguimiento. El reemplazo del hábito de autoayuda es prometedor para reducir los BFRB, pero no los síntomas concomitantes”, dice el informe del ensayo.
Al respecto, Carmen Aguilera, docente de la carrera de Psicología de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, asegura que este tipo de estudios, mientras sean técnicas y tipos de terapias científicas y basadas en y con evidencia científicas, serán útiles para estos y otros problemas.
“No debemos englobar o generalizar tratamientos o abordajes terapéuticos por las propias características de cada población que puedan incidir en la aparición de una psicopatología (…)”, dice.
Según la profesional, la ayuda al paciente desde la rama de la psicología puede darse a través de distintas técnicas clínicas que la Terapia Cognitiva Comportamental (TCC) ofrece, que, en su mayoría tiene una eficacia y efectividad a corto y largo plazo. “La misma está direccionada a determinar, identificar y cambiar pensamientos y comportamientos negativos o que están causando desadaptación en el sujeto”, indica.
Uno de ellos es la Terapia de Aceptación y Compromiso, la escucha activa, identificar los estímulos disparadores del problema (situaciones, personas, recuerdos, entre otros que desencadenan el problema) por ejemplo, dice Aguilera.
Para aclarar, no todos estos comportamientos autolesivos llevan al suicidio o a tener una con-notación psicopatológica de gravedad, a veces son pasajeros por la propia etapa por la que está pasando el sujeto.
De establecerse que las autolesiones están causando disfuncionalidad o si siente sensación de alivio después de autoagredirse, y estos son de gravedad o muy dolorosos, la frecuencia con la que se realiza la lesión, entre otros, es necesario acudir a un profesional de la salud mental para abordar de forma integral el problema.
En tanto, el director de la carrera de Psicología en Unifranz Santa Cruz, James Robles, indica que hay muchas técnicas que permiten sacar ventaja de la ansiedad, tales como:
1. Conciencia: el primer paso es tomar conciencia de cuándo y por qué te muerdes las uñas. Intenta identificar situaciones o emociones que te llevan a hacerlo para abordar las causas subyacentes.
2. Técnicas de relajación: la ansiedad y el estrés pueden ser desencadenantes para morderse las uñas. Practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda, la meditación o el yoga.
3. Técnicas de distracción: mantén tus manos ocupadas con actividades alternativas, como jugar con una pelota antiestrés, resolver un rompecabezas, tejer, dibujar o escribir.
4. Cortaúñas y lima de uñas: si las uñas no sobresalen demasiado, es menos probable que sientas la necesidad de morderlas.
5. Uñas postizas o esmalte amargo: el sabor desagradable puede actuar como un recordatorio para evitar el hábito.
6. Apoyo social: a menudo, compartir tus objetivos con alguien cercano puede proporcionar apoyo y motivación adicional.
7. Reforzamiento positivo: celebra tus logros y avances en el proceso de dejar de morderte las uñas. Recompénsate por cada período de tiempo que mantengas tus uñas sin morder.
8. Terapia de comportamiento: considera la posibilidad de buscar ayuda de un profesional de la salud mental que pueda aplicar técnicas de terapia de comportamiento para abordar el hábito de manera más profunda.
Por qué algunas personas se muerden o pellizcan las uñas o la piel
Más allá de ver el síntoma o el comportamiento en sí, por lo general son problemas en la autorregulación del individuo, en función a una serie de emociones que no se puede gestionar en un momento determinado.
“También puede ser efecto de varias situaciones generadoras de estrés que exacerbaron las estrategias de afrontamiento del individuo, sentir emociones negativas intensas, tener pensamiento negativos o desesperados que no puede controlar, la mayoría de estos relacionados con la ansiedad o autolesiones no suicidas, todos estos pueden ser causales por un lado”, dice Aguilera.
Por otro lado, problemas de autoestima, la falta de adaptabilidad a distintas situaciones vivenciales del individuo o que están causando desadaptación, también juegan un rol importante. Además de tener en cuenta la etapa evolutiva por la que está atravesando el sujeto, es necesario considerar estos aspectos a la hora de valorar y evaluar la psicopatología en sí, para recién llegar a un diagnóstico y por supuesto a un tratamiento o abordaje terapéutico.
También los factores biológicos, como tener una hipersensibilidad o vulnerabilidad afectiva por una disfunción o disminución de algunos neurotransmisores como la serotonina o problemas hormonales. Lastimosamente, también pueden presentarse consecuencias a corto y largo plazo, como:
● Psicológicos y socioafectivos, como los problemas de autoestima, lo que lleva a una autorregulación deficitaria. Pueden hacer que se muestre introvertido o tenga dificultad para hablar sobre lo que siente o está pasando en su vida, abulia, astenia y anhedonia, depresión entre otros.
●Físicas: ligadas a las infecciones que estos comportamientos pueden generar desde lo más leves hasta los más crónicos, no solamente a nivel dermatológico, sino anatómico interno (compromiso de órganos vitales).