Unifranz impulsa Ciudades Verdes, una iniciativa que florece con el liderazgo juvenil
Por Andres Zankis

Cuando era niño, Luciano Antelo solía visitar la reserva municipal de vida silvestre Tucabaca, en Roboré, Santa Cruz. Entre senderos, montañas y árboles, descubrió su amor por la naturaleza. Años después, ver cómo el fuego arrasaba con esos mismos paisajes lo marcó profundamente. La devastación causada por los incendios forestales se convirtió en una llamada a la acción.
Con tan solo 16 años, Luciano decidió liderar un cambio. A través de su programa Eco Hábitos, impulsó una campaña de reforestación en la zona, que reunió a su colegio, la Gobernación de Santa Cruz y a la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, en torno a un propósito común: devolverle el verde a Tucabaca. En el marco del proyecto Ciudades Verdes, lograron plantar 1.250 plantines de Ochoó, Tajibos y Jacarandá, especies nativas que simbolizan la esperanza y la resiliencia de la región.
“Cuando era niño me enamoré de los paisajes de Tucabaca. Ver cómo los incendios arrasaban con todo lo que un día me maravilló fue muy duro. Por eso decidí actuar”, cuenta Luciano con emoción, mientras comparte su deseo de inspirar a más jóvenes a cuidar el planeta. Su historia se ha convertido en un emblema de lo que Ciudades Verdes representa: jóvenes comprometidos que, desde la acción, construyen un futuro más sostenible.
La directora de Marketing de Unifranz Santa Cruz, Carola Miranda, destacó que este proyecto refleja la esencia del compromiso institucional con el medio ambiente. “Desde la academia creemos que cada árbol plantado representa una semilla de cambio. Ciudades Verdes es un compromiso con el planeta, pero también con la educación y el liderazgo de jóvenes que entienden que el futuro depende de lo que hagamos hoy”.
El proyecto Ciudades Verdes es una iniciativa de reforestación impulsada por Unifranz con alcance local y nacional, que aspira a plantar más de 5 000 árboles en La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz. Su meta es recuperar zonas severamente afectadas por incendios forestales, fortalecer la biodiversidad regional e impulsar una cultura ambiental donde comunidades, jóvenes y entidades públicas colaboren activamente por un futuro más sano.

Por su parte, Mary Luz Rivero, secretaria departamental de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente, resaltó la labor conjunta de las instituciones y el valor del liderazgo juvenil. “Como Gobernación, apoyamos y celebramos el compromiso de jóvenes como Luciano Antelo, que con su ejemplo inspiran a toda una generación a proteger nuestros bosques. Iniciativas como Ciudades Verdes, impulsada por Unifranz, nos recuerdan que restaurar la naturaleza es también restaurar la esperanza”.
Bolivia ha enfrentado incendios devastadores: solo en 2024 se quemaron más de 10 millones de hectáreas, principalmente en los departamentos de Santa Cruz y Beni. La Chiquitania, perteneciente al departamento cruceño, concentra más del 76 % de la pérdida de bosques en períodos recientes, lo que pone en riesgo cientos de especies y ecosistemas nativos.
El sueño de Luciano y de cientos de jóvenes como él demuestra que la sostenibilidad comienza con pequeñas acciones que pueden transformar realidades. Tucabaca vuelve a florecer, y con ella, florece también la convicción de que un futuro más verde es posible si lo construimos juntos.