Por Fernanda Lima
El beso en la boca demuestra el afecto en una pareja. Más allá de un gesto de cortesía, provoca un sube y baja de emociones que desemboca en una sensación de placer y bienestar.
¿Cómo la tecnología pudo haber revolucionado un acto tan humano? Hace algunas semanas, la empresa china Siweifushe presentó un prototipo que permite dar y sentir besos a distancia llamado MUA (en referencia al sonido que las personas hacen al dar o mandar un beso). Dicho dispositivo cuenta con unos labios de silicona que se conectan al teléfono móvil mediante una aplicación.
Marcelo Pacheco, director de la carrera de Ingeniería en Sistemas de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, explica el funcionamiento de este dispositivo. Cuenta con diferentes sensores que imitan el actuar de los participantes del beso en tiempo real.
“Cuando un usuario presiona sus labios contra la boca de silicona, los sensores de presión detectan la fuerza y la presión del beso, y los sensores de vibración crean una sensación parecida a la de un beso real. Se transmiten a través de la aplicación y se envían al dispositivo MUA de la otra persona, que recrea la sensación del beso en la boca del destinatario”, explicó Pacheco.
El dispositivo, cuenta también con una cámara integrada para que las personas puedan ver el rostro de la otra persona en el beso. La cámara recoge también el sonido del beso para su posterior reproducción.
MUA fue creado para facilitar la interacción entre parejas con una relación a distancia, quienes pueden anclar sus dispositivos para no poder besar a otros usuarios. La aplicación permite que un individuo pueda probar diferentes besos de personas que desconoce.
Aunque la tecnología aún se encuentra en sus primeras etapas de desarrollo, ha generado interés y entusiasmo en todo el mundo y ha abierto la posibilidad de nuevas formas de conexión emocional en el futuro”, asegura Pacheco.
Nuevas formas de conexión emocional
La Organización Mundial de la Salud (OMS) a través de estudios concluye en que las muestras de cariño y afecto humano son esenciales para el desarrollo del cerebro y crecimiento físico. Gracias a ellas, se libera una serie de hormonas que son beneficiosas durante la infancia y la adultez.
La tecnología ha revolucionado la forma en interacción humana. Pacheco asegura que el MUA podría iniciar la creación de nuevas formas de conexión emocional: “es un ejemplo de cómo la tecnología puede crear nuevas formas de conexión emocional y superar las barreras físicas y geográficas”.
En la semana de su lanzamiento, el polémico artefacto generó opiniones divididas, entre quienes lo califican de un invento “absurdo” y otros que lo consideraban una gran alternativa en parejas que tienen una relación a distancia. El futuro de este tipo de artefactos resulta incierto, pues depende de un sinfín de circunstancias culturales.
“En el futuro, es posible que veamos un aumento en la popularidad y el uso de este tipo de artefactos (…). Pueden ser útiles para personas con discapacidades físicas que pueden tener dificultades para expresar afecto de manera tradicional. También es importante tener en cuenta los riesgos y preocupaciones éticas asociados a estos”, asevera.