10 emprendedores bolivianos se beneficiaron con capital semilla para invertir en sus ideas de negocios. Los ganadores de la primera edición del Programa Nacional de Incubación “Impulsamos Bolivia”, recibieron cheques que suman en total 16.000 dólares que serán un impulso para sus emprendimientos.
“Impulsamos Bolivia” es liderado por tres instituciones que son, a su vez, incubadoras bolivianas, el Instituto de la Mujer & Empresa – IME de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, Actívate Sucre y EmprendeBo, quienes en alianza con Bridge For Billions, una organización internacional líder en programas de incubación internacional, y con el apoyo de PESLATAM, entidad dedicada a promover el emprendimiento social en América Latina y el Caribe, trabajaron de forma colaborativa para llevar adelante el programa.
“Creo que ésta es la única manera de impulsar Bolivia, hacerlo de manera conjunta creando sinergias y generando esta ecuación perfecta (…). Aquí estamos, unidos, de norte a sur, de oriente a occidente. Este es el talento que tiene Bolivia”, afirmó Verónica Ágreda Arq. DESA, Directora Ejecutiva del IME y Rectora de Unifranz.
Durante cuatro meses, el programa “Impulsamos Bolivia”, bajo una metodología internacional (Bridge For Billions), probada en 92 países del mundo, formó y capacitó 30 emprendedores y emprendedoras de La Paz, Santa Cruz, El Alto, Cochabamba y Sucre.
Impulsamos Bolivia contó con ocho módulos de capacitación donde se trabajó temas como: propuesta de valor, mapa de competidores, mapa de grupos de interés, modelos de negocio y marketing, precio y viabilidad del negocio, proyecciones financieras, plan de impacto, plan de crecimiento y resumen ejecutivo.
Ágreda, en palabras de circunstancia, reflexionó respecto a las dificultades que los emprendedores deben superar al momento de iniciar una idea de negocio y que por eso nadie quiere hacer innovación en el país; no solo porque cuesta caro o es mucho trabajo, sino porque se le ponen muchas piedras en el camino.
Los ganadores
Lo interesante de los 10 emprendimientos ganadores fue que cada institución que los apoyó seleccionó a sus ganadores tras una evaluación del jurado y presentación de sus proyectos.
Las ideas ganadoras están dentro del área de la tecnología, medio ambiente y social buscando generar un triple impacto con enfoques innovadores con liderazgo femenino, tales como el reciclaje de grandes volúmenes de latas de aluminio para convertirlas en agarradores de puertas y ventanas para la venta o dispositivos tecnológicos para medir el consumo de agua en las casas que cuentan con inquilinos para pagar un precio justo. Otro emprendimiento que destacó fue un servicio innovador, denominado “Warmi empollerada”.
Gabriela Acarapi, de Evoluzion Línea Sólida, ganadora del primer lugar del IME dijo que desde hace dos años y cinco meses hemos logrado gestionar más de cinco toneladas de chatarra de aluminio para transformarlos en accesorios de su marca.
“Evolución línea sólida ya cuenta con más de 20 productos diferentes y nuestros productos estrella son los jaladores del estilo minimalista y los del estilo colonial que se caracterizan por tener diseños únicos, son estéticos, ecoamigables. No solamente es su materia prima, sino también en su proceso productivo (…). En 2023 proyectamos crecer nuestras ventas en un 65% y como meta tenemos que llegar a 200.000 bolivianos. Nuestro objetivo de crecimiento es tener mayor capacidad de producción (…)” dijo la joven emprendedora.
En tanto, Jesika Ajata, representante de Warmi Empollerada, agradeció a las personas que intentaron desanimarla en su emprendimiento. “A esa gente que nos dijo que no iba a funcionar, gracias, porque de verdad me han hecho entender que Warmi Empollerada sí podía llegar lejos, pero que solamente tenía que armar un poquito más las piezas y ahora hemos ganado esto, que nos va a servir muchísimo para poder escalar. No tengan duda que Warmi Empollerada va a crecer un montón”.
Josué Jiménez, de ThingSees, destacó que su proyecto es de impacto ambiental porque busca prevenir el desperdicio del agua, que es elemento vital para el ser humano. “Gracias al IME y Bridge For Billions, por la oportunidad que nos dieron para presentar este proyecto e incubarnos. Estos seis meses y un poco más, fue de arduo trabajo para mi equipo”, afirmó.
Leticia Miranda, mentora de Rosa Guizada Vargas (quien no pudo llegar al evento), informó que el emprendimiento Quimera “produce miel, pero a través de la conservación de los bosques. Esto es muy importante en la zona de los valles cruceños, porque se está apoyando a las familias del lugar a desarrollar una economía sostenible”.
Ganadores y sus emprendimientos:
Instituciones que apuestan por Bolivia
La directora ejecutiva del IME destacó el “trabajo invaluable” que realizaron las tres instituciones que impulsaron el proyecto porque cuentan con equipos que están apostando por Bolivia y que creen en los emprendedores.
“Somos conscientes de que en Bolivia hay talento, hay talento tecnológico, hay personas que quieren generar impacto social, que quieren generar un impacto ambiental, porque quieren sacar a Bolivia adelante y ésta es la única manera de impulsarla”, dijo la Rectora de Unifranz.
El Instituto de la Mujer & Empresa (IME), es una institución que potencia la innovación, las habilidades y el liderazgo femenino. Desde hace cinco años el IME apoya el emprendimiento femenino para que ellas puedan salir adelante con sus emprendimientos.
EmprendeBo, es una empresa social que promueve el desarrollo de emprendimientos de triple impacto con base tecnológica.
Actívate Sucre, es una organización que trabaja con emprendedores para impulsar economías competitivas basadas en la innovación.
Programas de incubación
Los programas de incubación son aquellos que dan apoyo necesario a los negocios e ideas de negocio en sus etapas iniciales para que se desarrollen, se fortalezcan y crezcan. Esta es la etapa previa a la etapa de aceleración.
En Bolivia esta es una necesidad pues no existe un volumen grande de emprendimientos o startups a los cuales acelerar debido a que no pasan por una etapa de incubación necesaria. Dar capital semilla en estas etapas es clave, pero no es frecuente por los altos costos que demanda.
“No muchos nos atrevemos a apuntar por incubación, pero es necesaria porque si no hay incubación, no tenemos qué emprendimientos acelerar y, luego, nos topamos con emprendimientos acelerados que no han pasado por procesos de incubación, que posiblemente no están listos”, indicó la coordinadora del IME Unifranz, Xiomara Zambrana.