La Universidad Franz Tamayo, Unifranz sede Santa Cruz, organizó un acto simbólico para entregar las batas blancas a sus estudiantes de la carrera de Medicina, que comenzarán el internado rotatorio. Esta actividad marca el inicio de la etapa final para alcanzar la licenciatura.
El internado rotatorio es un programa que tiene el objetivo de aplicar y profundizar los conocimientos, habilidades y destrezas proporcionados a los estudiantes de Medicina. Durante un año, los jóvenes deberán rotar por diferentes áreas de su carrera en instituciones públicas o privadas para poner en práctica y reforzar todo lo que aprendieron, según el Ministerio de Salud.
“Esta es una oportunidad para aprender en la vida real, para ver cómo se trabaja día a día y entender el impacto que tendrán en la vida del paciente, aprendiendo de médicos experimentados”, expresó la directora de la carrera de Medicina, Raiza Viera.
La académica recomendó a los futuros profesionales que sean compasivos, que tengan el mismo cuidado y respeto que querrían para sus seres queridos. Resaltó que la empatía y la comprensión pueden ser tan poderosas como cualquier medicamento.
“Se encuentran por iniciar una de las etapas más desafiantes y gratificantes de su formación, porque no sólo pondrán a prueba sus conocimientos, sino también, moldeará sus corazones y mentes, preparándolos para convertirse en los médicos que el mundo tanto necesita”, agregó Viera.
Futuros médicos de excelencia y líderes en salud
En la oportunidad, se reconoció a los alumnos que alcanzaron las calificaciones más altas del semestre y se destacaron por su excelencia académica a lo largo de la carrera: Juliana Rodríguez, Sebastián Gutiérrez, Clara Becerra, Fabiana Escalante y Fernanda Ojeda.
“Este momento marca el fin de un capítulo de intenso esfuerzo y aprendizaje, pero también, el comienzo de una nueva y emocionante fase, el internado rotatorio. Durante nuestro tiempo de formación, no sólo adquirimos conocimientos, también hicimos amistades que se fueron fortaleciendo cada vez más y hoy nos consideramos como una segunda familia”, resaltó la estudiante Ojeda.
Por su parte, Andrea Salazar, quien también iniciará su internado rotatorio, señaló que no fue fácil llegar hasta esta etapa, pero aseguró que todo esfuerzo tiene su recompensa. La futura médica combinó su faceta como estudiante y como mamá, pues su pequeño Benjamín llegó a su vida cuando ella había cursado apenas los primeros semestres de la carrera.
“Siento mucha emoción de ver que ya hemos llegado a esta etapa y ansiosa de saber qué nos espera en el internado. Benjamín es mi todo, gracias a él he seguido adelante, porque en algún momento pensé en dejar la carrera, pero él es mi motor para seguir, todo el esfuerzo que estoy haciendo es por él”, indicó Salazar.
Logros que se festejan en familia
Sebastián Gutiérrez estuvo acompañado por su familia en el acto simbólico. El joven también fue reconocido como estudiante destacado por sus sobresalientes calificaciones y aprovechó el momento para agradecer a quienes le brindaron apoyo durante su formación como médico.
“Me siento muy feliz y agradecido con todas las personas que me han acompañado en esta etapa. Espero seguir adquiriendo conocimientos de médicos en el internado. Dedico este logro a mi familia, especialmente a mi papá y a mi mamá por su apoyo incondicional”, manifestó Gutiérrez.
Si tienes pasión por la Medicina y quieres ayudar a las personas a través de tu profesión, encuentra más información de la carrera en el siguiente enlace: https://ux.unifranz.edu.bo/medicina
