Imagine vivir en un ‘departamento inteligente’ donde varios de sus ambientes y servicios están automatizados. Al salir del trabajo activa el aire acondicionado desde el teléfono; una cuadra antes de llegar al edificio, también desde una APP, dispone la apertura de las puertas del garaje para ingresar con el vehículo.
La automatización alcanza la gestión energética, de seguridad, bienestar y comunicación. En otras palabras, la domótica permite la interacción entre el usuario y un sistema de objetos conectados a internet que por medio de una aplicación móvil ayuda a gestionar su funcionamiento. La afirmación proviene de Marcelo Pacheco, director de la carrera de Ingeniería en Sistemas de Unifranz.
Al entrar en el departamento inteligente, una orden de voz facilita el encendido de luces. No hace falta que se vaya de interruptor por interruptor. El microondas, la lavadora, el equipo de sonido, el televisor, hasta la ducha del dormitorio son controlados desde un teléfono móvil.
Con las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial, la domótica se está popularizando en casas, oficinas y departamentos. Facilita, en la mayoría de los casos, la vida de las personas, más aún si, en el hogar, hay una persona con discapacidad motora.
Los objetos están conectados a Internet. Todo ello es posible gracias al Internet de las cosas (IoT por sus siglas en inglés).
Qué es el Internet de las Cosas
El término se refiere a una nueva tecnología que conecta una multiplicidad de objetos a internet. Facilita un ecosistema interconectado de dispositivos y máquinas. El usuario controla los dispositivos desde cualquier lugar.
Esta tecnología ha transformado la forma en que las personas viven y trabajan. Con algunas limitaciones, ofrece una variedad de beneficios y oportunidades para las empresas, pero también para las personas.
Tendencias 2023 de la domótica
Con la creciente cantidad de dispositivos conectados a Internet, como los sensores, los electrodomésticos inteligentes y los dispositivos móviles; la domótica ha estado en constante crecimiento y se espera que continúe así este 2023 con una importante automatización del hogar, la industria y otros campos.
“Nos está mejorando la calidad de vida, al aumentar la seguridad y la comodidad del hogar y reducir el consumo de energía”, agrega Pacheco. El académico identifica algunos beneficios de la domótica al bienestar humano:
– Confort: La domótica permite controlar la iluminación, la temperatura, la música y otros aspectos del ambiente en el hogar de manera automática y personalizada. Mejora la comodidad y el bienestar de las personas.
– Seguridad: Los sistemas de seguridad domóticos pueden detectar situaciones de riesgo, como la presencia de intrusos o la fuga de gas. Ante estos peligros, toma medidas para prevenir accidentes o alertar a los ocupantes del hogar.
– Accesibilidad: La domótica puede mejorar la accesibilidad de personas con discapacidades, permitiéndoles controlar diferentes aspectos del hogar de manera más fácil e independiente.
– Eficiencia energética: Los sistemas domóticos pueden optimizar el consumo de energía en el hogar, reduciendo los costos y el impacto ambiental.
Cómo funciona la domótica
Un sistema de domótica típico está compuesto por tres elementos principales: sensores, controladores y actuadores.
Los sensores recogen información sobre el entorno, como la temperatura, la humedad, la presencia de personas y otros factores relevantes.
Los controladores procesan la información recopilada por los sensores y toman decisiones sobre cómo controlar los dispositivos conectados al sistema.
Los actuadores son los dispositivos que se activan para realizar una acción específica, como encender las luces o cerrar las persianas.
El sistema de domótica se controla a través de una interfaz central que puede ser una aplicación móvil, una tableta o un ordenador. Esta interfaz permite a los usuarios configurar y controlar el sistema de domótica, establecer escenas, programar eventos y recibir alertas en tiempo real.
La domótica en el mundo
La domótica ha crecido sostenidamente en los últimos años. Norte América, Europa y Asia son los continentes que tienen una oferta más consolidada. La consultora Research and Markets, en su informe sobre la domótica en América del Norte y Europa, afirma que Norteamérica ocupa el primer lugar en cuanto a implementación de sistemas domóticos, con cerca de 43.1 millones de hogares inteligentes en 2019.
El mismo estudio prevé que hasta 2024 más de setenta millones de hogares se volverán inteligentes en Norteamérica, mientras que en Europa la previsión de Research and Markets es que se alcanzarán 101,1 millones de hogares inteligentes.
En Bolivia la domótica está teniendo un crecimiento lento comparado a la de países vecinos. La tecnología es todavía costosa, aunque en las ciudades del eje central (Santa Cruz, Cochabamba y La Paz,) ya hay edificios domotizados, indica Abraham Quiroga, del área de sistemas de Unifranz.
“Las personas, gracias al Internet, conocen más sobre estas prácticas y una razón para que no sea tan conocida es que implementar estos sistemas era un poco costoso, pero ahora ya se lo puede utilizar por precios accesibles”, dice.