Por Lily Zurita y Beatriz Cahuasa
El acceso a medicamentos seguros es, todavía, un tema pendiente y de preocupación para las autoridades de salud. Pese a que el país cuenta con normas que regulan su venta, en los últimos años se ha evidenciado la comercialización libre de fármacos de contrabando y la automedicación por parte de los pacientes debido a la facilidad con la que pueden acceder a los mismos.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dan cuenta que, en el mundo, más del 50% de los medicamentos se recetan, dispensan o venden de manera inapropiada o en el mercado informal, sin cumplir protocolos de bioseguridad.
El director de la Carrera de Bioquímica y Farmacia de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, Daniel Pinto Mariaca, asegura que la automedicación es un problema de salud pública que debe ser regulada y que la población debe tomar conciencia sobre sus consecuencias.
“Cuando se compra un fármaco, en la cajita viene toda una prescripción, tiene un inserto donde describe una cantidad de efectos no deseados, efectos secundarios e interacciones que podrían ser incompatibles con algunas otras sustancias que el paciente podría estar consumiendo”, indica Pinto.
Esta problemática será abordada, este jueves y viernes, por el representante de la Agencia Estatal de Medicamentos y Tecnologías en Salud – AGEMED, Yuri Quisbert, durante el primer congreso internacional de epidemiología que se realizará en la ciudad de Cochabamba.
“El objetivo es que la población reciba la información acerca del organismo regulador nacional y se informe del por qué no se debe automedicar, por qué debemos comprar un medicamento en base a prescripción, por qué el paciente debe cumplir con los tiempos de consumo del medicamento y tener una resolución adecuada en cuanto a la enfermedad que tiene”, precisa el académico.
Cómo se deben manejar los medicamentos
La prescripción de un medicamento responde a una evaluación clínica por parte del médico; quien, a través de los servicios hospitalarios, es quien verifica qué medicamento debe administrarse a un paciente.
En muchos casos, antes de la prescripción de un medicamento se hacen pruebas laboratoriales, se realizan evaluaciones exhaustivas y, en base al cuadro del paciente, se le administra un medicamento. La manipulación de medicamentos requiere de controles de calidad.
“En muchos de los centros de referencia en los diferentes departamentos se tiene algo que se conoce como seguimiento fármaco terapéutico. Y también el control de la dosis unitaria. Es decir, qué cantidad de fármaco consume el paciente y cómo se hace el seguimiento de estos fármacos que los pacientes están consumiendo. En el país todavía estos programas están en desarrollo y esperamos a que se fortalezcan paulatinamente”, agrega Pinto.
Medicamentos de contrabando: un peligro para la salud
Si bien, la normativa vigente busca garantizar que los medicamentos que se ponen a disposición de la población sean eficaces e inocuos de buena calidad, y que se suministre información correcta acerca de ellos, hoy la venta de medicamentos ya no es exclusividad de una farmacia, de una distribuidora, sino que se los puede encontrar en tiendas de barrio o en el mercado informal.
“La ley, evidentemente, establece una regulación del manejo, importación y dispensación de los medicamentos. Sin embargo, en nuestro país son diferentes los factores que han permitido que se genere un mercado informal”, indica el doctor Pinto.
Lo cierto es que la venta libre de medicamentos está vinculada al ingreso de los mismos por la vía del contrabando y sin certificación respectiva, constituyéndose en un riesgo para la salud pública, debido a que el comprador desconoce el origen, los controles que han recibido esos medicamentos.
En Bolivia, el principal ente regulador del manejo de los medicamentos es el Ministerio de Salud en coordinación con los SEDES (servicios departamentales de salud) que tienen a su cargo la verificación y el constante peritaje de todas las farmacias y todos los centros de expendio.
Lamentablemente, el uso de la receta médica en los mercados informales no ha funcionado de manera efectiva porque no existe una regulación a ese nivel. Y el uso de receta en otros países es obligatorio.
“En nuestro país, uno de los principales problemas es los medicamentos de venta libre. Por tanto, uno puede ir a cualquier centro de expendio y puede comprar una variedad de analgésicos, una variedad de antimicrobianos que deberían ser regulados debido precisamente a que pueden provocar multi resistencia y otros efectos de tolerancia a los analgésicos (…)”, puntualiza.
Una ley regula el uso de medicamentos
La Ley del Medicamento (Ley 1737), de 1996, es la base de la Política Nacional del Medicamento, que regula todo el quehacer vinculado con los fármacos en el territorio boliviano.
También está vigente el Decreto Supremo Nº 25235 que reglamenta la Ley del Medicamento y el Decreto Supremo Nº 26873 del Sistema Nacional Único de Suministro. Además de las disposiciones reglamentarias que configuran la regulación farmacéutica. Actualmente la Autoridad Reguladora del Medicamento en el país es la Agencia Estatal de Medicamentos y Tecnologías en Salud – AGEMED.