Telemedicina: Una apuesta por la innovación en la formación de profesionales de la salud

En los últimos años, la tecnología ha transformado diversos sectores, y la salud no es la excepción. La telemedicina, entendida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el uso de tecnologías para la atención médica a distancia, ha revolucionado la manera en que los profesionales de la salud interactúan con sus pacientes. Esta modalidad ganó aún más relevancia en el contexto de la pandemia de COVID-19, cuando la necesidad de mantener el distanciamiento físico impulsó la adopción de consultas virtuales. Sin embargo, más allá de la emergencia sanitaria, la telemedicina sigue siendo una herramienta esencial para hacer más accesible la atención médica.

En este panorama, es fundamental que los profesionales de la salud, especialmente los médicos, estén preparados para utilizar estas herramientas digitales de manera eficiente. Para ello, Unifranz ha desarrollado una microcredencial en Innovaciones de Telesalud y Salud Digital, un programa educativo diseñado para capacitar a los futuros profesionales con las competencias necesarias para enfrentar los retos de la medicina moderna.

La Dra. Patricia Cabaleiro, docente de la carrera de Medicina en Unifranz, destaca que el objetivo de este curso es dotar a los estudiantes y profesionales de salud de los conocimientos y habilidades para integrar la telesalud en su práctica clínica.

«El avance tecnológico en la salud es imparable, y es fundamental que los médicos del presente y del futuro sepan cómo aprovecharlo para mejorar la atención a sus pacientes. Esta microcredencial permite que los profesionales se conviertan en personas adaptables y tecnológicamente competentes, capaces de integrar soluciones digitales en su ejercicio profesional”, comenta Cabaleiro.

La importancia de esta capacitación no solo radica en el conocimiento de herramientas tecnológicas, sino también en el desarrollo de competencias transversales y específicas. Los estudiantes que obtienen esta microcredencial aprenderán a aplicar normativas y principios éticos en entornos virtuales, una habilidad esencial dado el contexto de interacción digital. Además, se capacitarán en la toma de decisiones clínicas basadas en evidencia, gestionando la información médica de manera eficiente para facilitar su acceso y uso.

En cuanto al público al que está dirigida la microcredencial, está abierta no solo a los estudiantes de Medicina, sino también a aquellos que se encuentran en el internado rotatorio o ya han egresado, así como a profesionales de otras áreas de la salud como odontólogos y enfermeros. Esto refleja la universalidad de la telemedicina, que no solo los médicos deben estar familiarizados con estas herramientas, sino todo el equipo de salud que participa en la atención del paciente.

Por su parte, el Dr. Jaime Molina, también docente de esta microcredencial, coincide en señalar que la telemedicina ofrece oportunidades únicas para los profesionales de la salud. «Permite que los médicos amplíen su alcance de atención, llegando a pacientes en zonas rurales o de difícil acceso. A través de la telemedicina, los médicos pueden ofrecer consultas, diagnósticos y seguimientos sin importar la ubicación geográfica del paciente», afirma Molina.

Una de las ventajas más destacadas de la telemedicina es la posibilidad de reducir los costos y tiempos asociados al traslado tanto para médicos como para pacientes. Esto es especialmente relevante en países con extensas regiones rurales o donde los sistemas de salud están sobrecargados.

«La telemedicina también ha sido fundamental para mantener la continuidad del cuidado de los pacientes con enfermedades crónicas, lo que mejora significativamente su calidad de vida. En términos de competencias, los estudiantes y profesionales que se certifiquen en telemedicina aprenderán a manejar plataformas digitales de salud, evaluar y diagnosticar a distancia, así como manejar los aspectos éticos y legales relacionados con esta modalidad», agrega la Dra. Claudia Pinto, docente de la microcredencial.

Además, la integración de la inteligencia artificial en la telemedicina está abriendo nuevas posibilidades en la salud digital. El uso de estas tecnologías no solo facilita el diagnóstico y tratamiento, sino que también optimiza los procesos médicos, permitiendo un seguimiento más eficiente de los pacientes y la personalización de los tratamientos.