Manteniendo su compromiso con la sociedad y con el Banco Regional de Sangre de Santa Cruz, la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, realizó nuevamente una campaña para donar sangre. Fueron un total de 137 donantes; entre estudiantes, docentes, personal administrativo y la importante participación de personas externas a esta casa superior de estudios.
La campaña de donación de sangre se viene realizando en Unifranz hace más de 10 años. En la logística colabora toda la Facultad de Ciencias de la Salud con las carreras de medicina, bioquímica y farmacia, enfermería y odontología.
“Quiero agradecerles a todas las personas solidarias que participaron de esta campaña. Aplaudo la capacidad voluntaria de aquellos que durante tantos años nos han apoyado y hacen que sigamos ayudando a tanta gente que lo necesita. Nunca debemos olvidar que donar sangre, es donar vida”, resaltó Patricia Avilés, directora de la carrera de Bioquímica y Farmacia de Unifranz Santa Cruz.
Todas las personas que estén entre los 18 y 65 años, que pesen más de 50 kilos y se encuentren en buen estado de salud, pueden donar sangre. Es importante no presentar fiebre ni haber padecido una enfermedad en los últimos siete días.
Se recomienda que la persona que vaya a donar, lo haga ya desayunado. El tiempo mínimo conveniente entre dos donaciones de sangre es de dos meses. Después de haber donado, la persona puede presentar mareo, náuseas, sensación de frío, hormigueo en labios y nariz. La recuperación será paulatina y no afectará las actividades cotidianas.
¿Qué impide donar sangre?
Existen personas de buen corazón, que por motivos de emergencia o por simple solidaridad, son voluntarias para donar sangre, sin embargo, no todos pueden ser donantes.
Estar en estado de gestación, haber tenido una operación reciente, presentado síntomas de Covid-19 en los últimos 10 días, haberse realizado tatuajes y perforaciones en un tiempo menor a 12 meses, impide que alguien pueda donar.
Si una persona tuvo relaciones sexuales ocasionales o de riesgo en el último año, es recomendable que no sea donante.
Aquellos que tienen enfermedades cardiacas, pulmonares, renales, anemia, hemofilia, úlcera activa, cáncer, trastorno de coagulación, haber tenido antecedentes de hepatitis C o B, chagas, accidente cerebrovascular, ser portador del virus VIH o ser usuario de drogas, tampoco pueden ser donantes.
Toda sangre que es recolectada en hemoterapia, pasa primero por distintos análisis para detectar posibles enfermedades transmisibles. Sin embargo, existe un periodo llamado «ventana serológica», que es el tiempo que pasa desde que una persona se infecta hasta que la infección puede ser detectada en las pruebas. Es decir que, si una persona dona sangre estando en el periodo de ventana, la enfermedad no podrá ser detectada en el laboratorio.
Según el Ministerio de Salud, en Bolivia está creciendo la voluntad de donar sangre, por ejemplo, en el 2003, alrededor de 35.641 personas donaban sangre (entre voluntarios y exigidos), en el 2018, esta cifra ascendió a 124.899 personas.
Si hablamos de donantes voluntarios, en el 2003 habían 6.212 y en el año 2018 se llegó a 41.068 voluntarios altruistas.