Un giro de enfoque y acciones consolidadas urgen a varias empresas hoteleras para recuperar la economía propia y regional. Este desafío de reinventarse pasa por diseñar un bussines plan (plan de negocios) y posicionar de mejor manera la marca en redes sociales.
Freddy López Heredia, docente de la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, asegura que, para impulsar el sector es necesario aplicar una serie de efectivas estrategias.
“Si bien algunos líderes del mercado han logrado una recuperación más ágil, debido a su enfoque en la calidad y la mejora continua, muchos otros hoteles están enfrentando dificultades significativas. Algunos ni siquiera logran alcanzar el punto de equilibrio del 30% de ocupación necesaria para cubrir los costos operativos”, afirma el académico.
López sugiere trabajar en la promoción de eventos que promuevan el destino turístico donde están asentados, pero requiere de la participación de otros interesados, similares, como empresas organizadoras de eventos y agencias de turismo y de viaje. “Aliarse con estas entidades permitiría promover tanto el mercado corporativo como el turismo en la ciudad”, agrega.
Otra tarea es mejorar la presencia en redes sociales e invertir de manera significativa para consolidar posicionamiento, con la directriz del turismo interno y vacacional.
Cada paso responde a una estrategia adecuada
Definir una estrategia adecuada para impulsar el sector hotelero requiere algunas acciones consideradas ‘clave’, como sostener la unidad en el sector, porque se debe establecer una relación estrecha con el Estado y promover la colaboración entre los empresarios hoteleros.
Un business plan (plan de negocios) es necesario para consolidar la inversión, tanto de los hoteleros, privada, como la pública. Esta estrategia debe incluir visión, identificar los mercados potenciales, realizar un estudio del mercado interno y externo, establecer estándares de calidad, rediseñar y mejorar los atractivos turísticos cercanos a los hoteles.
A todo esto, se suma la planificación de una estrategia de medios en los mercados potenciales, implementar publicidad y diseñar un plan de redes sociales, enfocado al destino turístico.
Otro paso clave es la promoción del destino con campañas de marketing que resalten los atractivos turísticos, la cultura local y las experiencias únicas que ofrece el destino. Las cruzadas individuales deben conquistar a los viajeros y resaltar los beneficios y diferenciación de cada establecimiento.
Son importantes las alianzas estratégicas con otras organizaciones relacionadas con el turismo, como agencias de viajes, operadores turísticos, empresas organizadoras de eventos y ferias comerciales. Esta red de contactos puede ayudar a aumentar la visibilidad del destino y atraer a más turistas.
Toda empresa debe apuntar a la mejora continua, que es esencial para monitorear los resultados y ajustar las estrategias. Se debe recopilar datos con retroalimentación de los clientes, para identificar áreas de mejora y brindar una experiencia de calidad.
De la crisis a la supervivencia
La hotelería sufrió duramente el impacto de la pandemia. Pero, el sector ya enfrentaba dificultades, en medio de los conflictos sociales de 2019.
La operatividad de los hoteles conlleva costos significativos, y al estar vacíos, afrontan despidos masivos, cierres de establecimientos y otras medidas drásticas para sobrevivir.
Durante el proceso de recuperación pospandemia, muchos hoteles optaron por reducir la calidad de sus servicios, bajo el argumento de la bioseguridad. Esto implicó restringir algunos servicios de comida y atención al cliente, debido a la contratación de personal poco experimentado.
“Se requieren medidas de apoyo, tanto a nivel gubernamental como de la comunidad, para revitalizar el turismo y permitir que los hoteles vuelvan a operar plenamente. La recuperación será un proceso gradual, pero con el compromiso y la colaboración de todos los actores involucrados, el sector hotelero podrá superar los desafíos actuales y prosperar una vez más”, asegura López.
La nueva realidad mundial afecta aún al sector hotelero. Las empresas que tenían hasta el 90% de la ocupación hotelera, han optado por utilizar herramientas tecnológicas para llevar a cabo sus reuniones, en lugar de viajar.
Se espera que, con el tiempo y el apoyo adecuado del Estado, el sector pueda recuperarse y adaptarse a la nueva realidad, para así ofrecer servicios y experiencias que se ajusten a las necesidades cambiantes de los viajeros y las empresas.