Los ingenieros comerciales dejan de lado proyectos en papel. Con el Fab Lab Santa Cruz tienen la opción de sacar prototipos de los productos o proyectos en los que trabajan; y perfeccionarlos antes de lanzarlos al mercado para que tengan un mayor impacto. Esta es una de las 15 carreras de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, que incorporó en su malla curricular el uso del laboratorio de fabricación para dar vida a sus proyectos.
“El Fab Lab Santa Cruz generó un impacto muy importante para los ingenieros comerciales. La mayor parte del tiempo estamos pensando en nuevos productos y proyectos, pero, debido a los costos, muchos no tenían las posibilidades de ver el resultado físico, ni si quiera como prototipo en una primera instancia. Ahora pueden ver y tocar su creación, incluso hacer mejoras antes de lanzarlo al mercado”, asegura Hammeleth Saavedra, director de la carrera en Ingeniería Comercial de Unifranz Santa Cruz.
El Fab Lab Santa Cruz abrió sus puertas en agosto de este año para ser el laboratorio de fabricación digital más completo de Bolivia. Cuenta con herramientas modernas como impresoras 3D, laboratorios de realidad virtual y aumentada; y máquinas CNC (Control Numérico Computarizado) capaz de medir, automatizar y controlar sus propios procesos.
Los ingenieros comerciales al igual que emprendedores, profesionales, estudiantes y toda persona que desee ejecutar sus proyectos podrán hacerlos en este espacio y ser asesorado por expertos. En esta primera etapa del proceso de creación inició con el diseño y fabricación de credenciales, llaveros, porta celulares, envases, pero se abre a una amplia variedad de artículos e iniciativas.
Saavedra asegura que los ingenieros comerciales tendrán la capacidad de realizar estudios, crear grupos focales o sondeos para determinar si su prototipo tendrá aceptación en el mercado o conocer qué elementos deben mejorar.
“A través de la cortadora laser o de las impresoras 3D y el asesoramiento de los expertos del Fab Lab Santa Cruz, los emprendedores verán materializada su idea en solo unos minutos. Esto es muy importante, porque les permitirá exponerla a un determinado grupo para que le brinde una devolución y analice qué aspectos debe mantener o cambiar de su producto antes de lanzarlo al mercado”, afirma.
El diseño y elaboración de proyectos en el Fab Lab se incorporó en la malla curricular de las 15 carreras de Unifranz. De esta forma todos los estudiantes de la universidad tendrán la oportunidad de ingresar a este espacio donde confluyen ciencia, tecnología y donde podrán hacer realidad sus ideas a partir de la fabricación digital. Estas habilidades los dejarán mejor preparados para enfrentar el mundo laboral.
Los jóvenes tienen la oportunidad de diseñar en 3D y fabricar todo lo que ellos puedan imaginar, integrando electrónica con microcontroladores como Arduino, tales como prótesis, joyas, adornos, caretas, piezas mecánicas, prendas de vestir, muebles y más. El FabLab es un lugar donde la imaginación y creatividad rompen todos los límites.
Ingeniería comercial
Un estudio realizado por la Encuesta de Mercado Laboral en Bolivia, señala que los profesionales en Ingeniería Comercial forman parte del grupo que más demandan las empresas en el país. El 82% requiere profesionales vinculados a dos áreas: la primera es ciencias económicas, financieras y comerciales (50%); y la segunda es ingeniería y tecnología (32%).
Las instalaciones del laboratorio de fabricación digital están disponibles para cualquier persona que desee hacer realidad su idea. Los servicios de asesoramiento y capacitaciones no tienen costo, los interesados sólo deben cubrir los gastos de material.
Según los protocolos, primero se hacen los diseños en 3D en el Fab Lab, la información pasa a las máquinas que, de manera inteligente, ejecutan los proyectos. En este espacio se hacen realidad una infinidad de trabajos, no sólo para la comunidad universitaria sino para toda la población.
El Fab Lab utiliza software de diseño asistido por un ordenador de última generación para la creación de prototipos y maquetas en arquitectura, construcción, diseño industrial o cualquier actividad que necesite la conexión a una computadora para manipular materiales.
En el 2022, Santa Cruz se consolidó como el motor económico del país aportando con el 31% al Producto Interno de Bolivia (PIB), según datos brindados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El PIB considera todo el Valor Agregado que genera un país en un año, es decir todos los ingresos que perciben los agentes económicos y el destino de esos ingresos.