Estudiantes de Unifranz desarrollan Soyberry, un yogurt saludable sin lactosa
Por Andres Zankis
Estudiantes de la carrera de Bioquímica y Farmacia de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, desarrollaron “Soyberry”, un yogur vegetal a base de soya como una alternativa nutritiva y accesible para personas intolerantes a la lactosa. El proyecto combina innovación, salud y sostenibilidad, respondiendo a una necesidad real de la sociedad desde el conocimiento científico.
La propuesta nace en el marco del modelo educativo de Unifranz, que promueve el aprender haciendo como eje central del proceso formativo. A través de esta metodología, los estudiantes no solo adquieren competencias técnicas, sino que también generan soluciones con impacto social y ambiental.
El yogur vegetal elaborado incorpora una mermelada artesanal de frutos rojos, lo que potencia su valor nutricional y sensorial. Se trata de un producto libre de lactosa, más ligero y con aporte de proteínas vegetales, pensado para un consumo saludable y consciente.
“La idea de un yogur vegetal nace a partir de la gran cantidad de personas que son intolerantes a la lactosa, de ahí surge la iniciativa de elaborar un yogur de leche de soya con mermelada de frutos rojos. Este producto no tiene lactosa, es más ligero y además contiene proteínas vegetales, lo que lo convierte en una alternativa saludable”, explicó Kamila Paredes, estudiante de Bioquímica y Farmacia.
Para las estudiantes, el desarrollo del proyecto también tuvo un componente humano y social significativo. La posibilidad de contribuir al bienestar de otras personas fue un incentivo clave durante todo el proceso de investigación y elaboración.
“Se sintió demasiado bien porque estamos ayudando a muchas personas a tener una alternativa más para que puedan consumir. Saber que nuestro conocimiento puede mejorar la calidad de vida de otros le da un sentido más profundo a nuestra formación”, añadió Paredes.
El proceso de creación del yogur vegetal se extendió durante dos meses e incluyó diversas etapas de experimentación y validación. Las estudiantes realizaron múltiples pruebas en laboratorio hasta lograr un producto aceptable y deseable para el público objetivo.
“Ponemos en práctica el aprender haciendo mediante investigaciones y pruebas que realizamos en laboratorio, con muchos intentos hasta lograr el producto final. Fue un proceso laborioso que incluyó investigación, elaboración y ajustes constantes hasta obtener un resultado favorable”, señaló Ana Paula Bulacia, también estudiante de Bioquímica y Farmacia.
Este tipo de iniciativas reflejan el compromiso de Unifranz con una educación de calidad, orientada a la responsabilidad social. A través de su modelo educativo innovador, la universidad forma profesionales capaces de aportar soluciones creativas a los desafíos de la salud, cuidando al mismo tiempo el medio ambiente y el bienestar colectivo.