Redes sociales exponen a las mujeres a estereotipos y limitan su acceso a carreras STEM

Al terminar el colegio, Marisa Córdova buscó estudiar ingeniería de sistemas, pero se dio cuenta que sus redes sociales le ofrecían contenido “femenino”, como ropa, maquillaje y otros, cuando ella buscaba información sobre tecnologías. Un informe reciente de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco) advierte que los contenidos en redes sociales, dirigidos por algoritmos, pueden ser dañinos para las niñas.
“Por más que buscaba información en Internet, seguía a páginas sobre tecnología, la red siempre me mostraba ‘cosas de chicas’, vestidos, makeup y estilo de vida, cosas interesantes, pero que no se acercaban a las búsquedas que yo realizaba, haciéndome dudar si estaba tomando la decisión adecuada sobre mi vida”, recuerda Córdova.
El informe “La tecnología en los términos de ellas” de Unesco alerta que las redes sociales amplifican los estereotipos de género, exponiendo a las niñas y jóvenes a materiales que van desde la sexualización hasta los estándares corporales de belleza poco realistas. Esto afecta su autoestima, imagen corporal, salud mental y opciones profesionales, alejándolas de áreas como la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM).
Por su parte, Lucía Alvarado, coordinadora nacional de Investigación de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, y miembro de la Organización para las Mujeres en Ciencia para el Mundo en Desarrollo (OWSD), destaca la importancia de empoderar a niñas y mujeres en STEM.
“Lo que se busca es disminuir las brechas de género, gracias a diversas estrategias, siendo una de ellas la visibilización de científicas mujeres, sus trayectorias y experiencias de vida en la ciencia, para que se pueda, de esta manera, fomentar y empoderar la participación plena y equitativa en la ciencia para más mujeres y niñas”, explica la académica.
La Unesco subraya que estas plataformas generan un círculo vicioso, promoviendo estereotipos que refuerzan la idea de que las STEM son campos masculinos, lo que limita la participación de las niñas en el diseño de herramientas tecnológicas que podrían cambiar esta narrativa.
Asimismo, Zulma Aliaga, responsable de la Jefatura de Enseñanza y Aprendizaje (JEA) de Unifranz, considera clave motivar a las niñas desde el colegio para que vean en la ciencia y la tecnología un camino viable y estimulante.
“Es imprescindible que se motive desde los colegios a las niñas y en las etapas universitarias a las jóvenes, a desenvolverse en la ciencia y la tecnología, darles la confianza de que pueden ser excelentes ingenieras de sistemas, investigadoras, científicas y mostrar ejemplos de mujeres en la ciencia que van desde Marie Curie a Carla Giacomelli para incentivar a nuestras mujeres y niñas a seguir ese camino”, comenta.
El estudio de la Unesco revela también que las mujeres que se deciden a participar en el campo enfrentan desafíos como menor remuneración, menos publicaciones y barreras para avanzar en sus carreras, entre otras.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) subraya que “en América Latina y el Caribe se ha avanzado: actualmente, el 41% de los graduados en STEM son mujeres. Sin embargo, el logro de la paridad en la educación STEM sigue estando lejos”.
Finalmente, el informe de la Unesco concluye que se necesitan políticas más inclusivas y modelos visibles en las redes sociales para inspirar a las jóvenes a considerar las STEM como una opción profesional.
“Los esfuerzos políticos deben centrarse en promover modelos, también en las redes sociales, para fomentar la elección de carreras en STEM entre las mujeres jóvenes. Mejorar el acceso de las niñas a los estudios de STEM es fundamental para garantizar que las mujeres participen en igualdad de condiciones, en la transformación digital de nuestras sociedades, y apoyar el diseño de tecnologías realmente inclusivas”, reflexiona la Unesco.