Buscar ayuda psicológica puede ser difícil, existen prejuicios, costos y también horarios, por estas razones, miles de jóvenes de entre 16 y 30 años han cambiado su atención hacia la Inteligencia Artificial (IA) en busca de apoyo; sin embargo, ¿es la IA una opción confiable para recibir apoyo psicológico? ¿Cuáles son los pros y los contras de esta tendencia?
“El uso de las inteligencias artificiales para usos terapéuticos suena como una propuesta interesante e innovadora, además se adecua a la concepción de la difusión de una salud mental al alcance de todos, ya que se trata de tecnologías accesibles a todas las poblaciones. Sin embargo, el humano es un ser muy complejo, y quizás una opción tecnológica podría poseer sus limitaciones. En todo caso se podría establecer panoramas adecuados para la utilización de chatbots”, señala Favio Javier Sandoval, docente de la carrera de Psicología de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
En días pasados, un reporte de la BBC encontró que en la plataforma Character.ai el personaje ‘Psicólogo’ ha recibido 78 millones de mensajes desde que fue creado por un usuario llamado ‘Blazeman98′ hace poco más de un año. Este bot no es el único de este estilo, ya que en la aplicación se encuentran 475 robots sobre temas de terapia, psiquiatría y psicología.
A medida que esta tendencia se hace más fuerte en el campo de la salud mental, la discusión sobre su efectividad y ética continúa. Está claro que estos bots podrían ofrecer un recurso útil para la ayuda inmediata, mientras que otros advierten sobre sus limitaciones para emular el pensamiento humano y su tendencia a reflejar sesgos inherentes en los modelos de IA.
La inclusión de estos asistentes de IA en entornos clínicos, aunque aún controvertida, también está en ascenso. Servicios como Limbic Access han obtenido certificaciones médicas en el Reino Unido y son utilizados en múltiples sistemas de salud pública para clasificar y evaluar pacientes.
Limbic Access es una herramienta basada en inteligencia artificial que respalda evaluaciones y derivaciones en terapias psicológicas. El software puede evaluar a los pacientes, señalar derivaciones no elegibles y realizar preguntas clínicas. Como resultado, el software reduce la carga administrativa de los médicos, les apoya en la toma de decisiones clínicas y les ayuda a priorizar a los pacientes de alto riesgo.
Beneficios y limitaciones
Sandoval indica que entre los beneficios que puede tener una IA que actúe como apoyo terapéutico se podría mencionar la accesibilidad y rapidez que podrían tener estas herramientas.
Sam Zaia, el creador del bot de Character.ai, aseguró que nunca lo creó pensando en que se convirtiera en una herramienta para que ayude a la gente, los usuarios que lo probaron tuvieron la oportunidad de explorar sus emociones o encontrar un acompañante en momentos de soledad a altas horas de la madrugada.
Por su parte, Génesis Dánae Selaya Ticona, docente de la carrera de Ingeniería de Sistemas indica que los chatbots pueden servir de apoyo en el cuidado y tratamiento de la salud mental, al permitir una interacción directa y sin restricciones, pero que esto también tiene sus límites.
“Para el área de salud mental, se ve que la IA es un facilitador de apoyo, a veces uno se siente solo y con la IA tiene con quien hablar y que le responda, lo difícil de la IA es que sea empática. La IA no es empática como tal, pero es algo que se está desarrollando, por eso es importante el acompañamiento con el experto. La IA puede ayudar en seguir el proceso, apoyar y ayudar a que salgan las emociones del paciente y que todo eso se grabe y se reporte al terapeuta porque esto sirve como feedback”, acota.
El psicólogo, a su vez, indica que las limitaciones principales de la IA son el alcance de las intervenciones que ofrece esta herramienta, considerando el amplio abanico de problemáticas que padece el ser humano.
“En todo caso hay que advertir que la práctica psicológica tradicional, aquella que se da en la presencia de un paciente y un terapeuta, no es, meramente, un intercambio de información, sino un acto interactivo que cambia las perspectivas del consultante. No sé si un chatbot podría proporcionar esa experiencia. De todas formas, hay que analizar las posibilidades”, agrega.
Sin embargo, el experto apunta que los chatbots podrían ser utilizados en primeros auxilios psicológicos que es un nivel inmediato de atención, donde se busca la contención de un sujeto en crisis. “Si un consultante utiliza estas herramientas en ese sentido, es probable que encuentre una estabilización y un impulso a una terapia tradicional. Aquello que posibilite un cambio es siempre deseable y que es mejor intentar decir las cosas, ya sea a un terapeuta o a un terapeuta virtual, para poder tener tentativas de reconstrucción del sujeto”, argumenta.
Por su parte, Selaya Ticona, indica que el uso de estos chatbots es positivo, siempre y cuando sea como apoyo a la labor de un terapeuta humano.
“Un chatbot que implemente la IA podría ser usado para armar un pequeño sistema experto. Este sistema experto, como su nombre lo indica, acompaña al experto, lo guía para tomar decisiones, pero no va a suplirlo, en este caso al terapeuta, al psicólogo o al psiquiatra”, agrega.
Esto debido a una de las principales limitaciones de las IA al momento, la imposibilidad de estas de tener emociones.