En constante aumento, la diabetes tipo 2 es una de las enfermedades silenciosas con mayor prevalencia en el mundo. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente, 62 millones de personas en las Américas (422 millones de personas en todo el mundo) tienen diabetes tipo 2. Por eso es importante reconocer las señales.
La enfermedad causa 244.084 muertes en la región (1.5 millones en todo el mundo) cada año, develan datos de la OMS..
La diabetes es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en la sangre (o azúcar en sangre), que, con el tiempo, conduce a daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios.
La más común es la diabetes tipo 2, generalmente en adultos, que ocurre cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina o no produce suficiente insulina. En las últimas tres décadas, la prevalencia de la diabetes tipo 2 ha aumentado drásticamente en países de todos los niveles de ingresos.
“Es una enfermedad silenciosa debido a que los síntomas más evidentes aparecen tarde y muchas veces pueden ser confundidos con señales de otras enfermedades, por lo que es importante estar atento a ellos”, señala Patricio Gutiérrez, docente de la carrera de Medicina de la Universidad Franz Tamayo.
Gutiérrez indica que hay cinco señales inequívocas de la diabetes, las cuales son:
- Manchas en el cuello
“Sí notas que el cuello se te pone negro a pesar de que te bañas, puedes tener diabetes”, indica el doctor.
De acuerdo con información del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), las manchas negras en el cuello y otros lugares del cuerpo, también son conocidas como Acantosis nigricans (AN)
Esta afección de la piel produce una mancha oscura o una franja de piel aterciopelada que puede aparecer en los pliegues del cuerpo como en el cuello, las axilas o la ingle. A veces, las manchas también aparecen en las manos, los codos o las rodillas.
La acantosis nigricans es un signo de resistencia a la insulina y puede ser una señal de prediabetes o de diabetes tipo 2. Es común en personas con obesidad.
Algunas cremas pueden mejorar el aspecto de las manchas, pero el tratamiento más eficaz es abordar la causa principal, como la obesidad o la resistencia a la insulina. Los cambios en el estilo de vida, como hacer actividad física y mantener un peso saludable, pueden ayudar a revertir la resistencia a la insulina.
- Sueño y fatiga después de comer
“Si después de haber almorzado te da sueño y tienes ganas de tomar una siesta necesaria, eso también es un indicador de diabetes”, dice Gutiérrez.
La fatiga es un síntoma común de la diabetes y puede aparecer debido a niveles altos de azúcar en la sangre. La fatiga y el cansancio no son lo mismo. Cuando una persona está cansada, usualmente se siente mejor después de descansar. Cuando una persona tiene fatiga crónica, es posible que el descanso no alivie la sensación de extenuación y letargo.
Según la Sociedad de Diabetes de Estados Unidos (ADA, por sus siglas en inglés), un estudio demostró que el 61% de las personas con diabetes tipo 2, diagnosticada recientemente, reportó la fatiga como un síntoma. El mismo estudio determinó que la fatiga es el segundo síntoma más común en este grupo.
- Verrugas
“Que aparezcan nuevas verrugas en la piel de color oscuro, eso también es una señal de sospecha”, explica el especialista.
De acuerdo con el CDC, uno de los motivos más frecuentes de las verrugas es la aparición de resistencia a la insulina. Las verrugas pueden ser un signo de que se está creando esta resistencia, aunque no tiene porqué indicar que existe un cuadro diabético. Aparecen de forma numerosa, tanto en la zona trasera del cuello como bajo las axilas y a su alrededor.
- Cambios de peso
“Si subes y bajas de peso muy frecuentemente, si la ropa que antes te quedaba apretada y ahora te queda floja, eso también es un indicador”, expresa el médico.
La insulina es una hormona que permite que el azúcar salga del torrente sanguíneo y entre en las células que la utilizan para obtener energía. En la diabetes tipo 2, las células no responden a la insulina como deberían. Esto se denomina resistencia a la insulina.
Como consecuencia, el páncreas produce más insulina para superar la resistencia. Eventualmente, el páncreas es incapaz de producir suficiente insulina para obtener una cantidad bastante de azúcar en las células. Esto hace que los niveles de azúcar en sangre aumenten.
Dado que las células no pueden obtener la energía que necesitan de la glucosa, el cuerpo descompone la grasa para utilizarla como energía. Esto puede provocar la pérdida de peso.
- Sed y micción excesiva
“Si tienes muchísima hambre y muchísima sed y orinas mucho, ésa es la señal más fuerte de que podrías tener diabetes”, dice el médico.
Por lo general, tener mucha sed y orinar seguido son síntomas frecuentes de la diabetes. En las personas que tienen diabetes, el exceso de azúcar, también llamada glucosa, se acumula en el cuerpo. Esto obliga a que los riñones hagan un mayor esfuerzo para filtrar y absorber el exceso de glucosa.
Cuando los riñones no pueden hacer el trabajo, el exceso de glucosa pasa a la orina y se lleva consigo líquidos de los tejidos del cuerpo. Esto causa deshidratación, que por lo general conlleva una sensación de sed. Beber más líquidos para saciar la sed causa una mayor micción.
Como conclusión, el doctor Gutiérrez señala que la diabetes es una de las principales causas de ceguera, insuficiencia renal, ataques cardíacos, derrames cerebrales y amputación de miembros inferiores. La diabetes mal controlada aumenta las posibilidades de estas complicaciones y la mortalidad prematura. Además, las personas afectadas con este mal tienen mayor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares y tuberculosis, especialmente aquellas con mal control glucémico.