Psicología y tecnología, una alianza destinada a mejorar la salud mental

Psicología y tecnología, una alianza destinada a mejorar la salud mental

En un mundo cada vez más digitalizado, la Psicología se encuentra ante una desafiante encrucijada, en la cual la tecnología no sólo comenzó a transformar la práctica clínica, sino también la forma en que se enseña esta disciplina de la salud en las universidades.

Desde la realidad virtual (RV) hasta los algoritmos de aprendizaje automático, la tecnología en esta disciplina evolucionó con rapidez y en la actualidad abre nuevas puertas para los profesionales, pero también plantea desafíos que las instituciones educativas deben abordar.

«La sinergia entre la tecnología y la psicología ha dado lugar a un nuevo paradigma en la promoción de la salud mental, donde las intervenciones tecnológicas complementan y potencian los procesos terapéuticos tradicionales», asegura Ingrid Barrios, profesional en el área y docente de la carrera de Psicología de Universidad Franz Tamayo (Unifranz) de El Alto. Esta transformación, asegura la especialista, es crucial para preparar a los futuros psicólogos, de modo que sepan enfrentar los desafíos del mundo moderno para brindar un apoyo integral a aquellos que buscan mejorar su bienestar mental.

Barrios sostiene que la integración de herramientas tecnológicas en la educación psicológica no sólo permite una atención más asequible y eficiente, ya que también potencia las capacidades de los profesionales para abordar los desafíos contemporáneos de manera innovadora y efectiva.

Los beneficios de la tecnología aplicada a la Psicología

Desde su conformación como ciencia, la Psicología se basó en el diálogo, la empatía y la comprensión. Sin embargo, en la era de la tecnología, estas prácticas están siendo complementadas y enriquecidas por una amplia gama de herramientas digitales. Desde la digitalización de pruebas psicológicas hasta la terapia en línea y la Inteligencia Artificial (IA) aplicada al diagnóstico, la tecnología llegó para revolucionar el campo de la salud mental.

  • Las nuevas herramientas tecnológicas permiten a los psicólogos una mayor accesibilidad, en especial para atender a personas que viven en zonas rurales o que tienen dificultades para acceder a la atención presencial.
  • Las herramientas tecnológicas pueden ayudar a los psicólogos a realizar tareas operativas de forma más rápida y eficiente, para liberar tiempo y dedicarlo a la atención personalizada de los pacientes.
  • La tecnología permite desarrollar nuevos métodos de tratamiento, como la terapia virtual o la terapia asistida por robots, que pueden ser beneficiosos, según el perfil del paciente.
  • Las nuevas tecnologías también permiten personalizar la atención psicológica y adaptarla a las necesidades de cada paciente. Sin embargo, es crucial que esta integración se realice de manera ética y responsable, siempre priorizando el bienestar del paciente.
  • Además, facilitan la investigación en Psicología y hacen posible el desarrollo de nuevas herramientas de evaluación e intervención.

Pero, ¿Qué significa esto para la educación en Psicología?

Las instituciones educativas tienen el desafío y la oportunidad de adaptarse a esta nueva realidad y transformar la forma en que enseñan.

“La psicología, en su constante evolución, se beneficia de la incorporación de herramientas tecnológicas que amplían el abanico de posibilidades terapéuticas. Sin embargo, es esencial reconocer que la tecnología no sustituye la habilidad del psicólogo para establecer vínculos terapéuticos auténticos. La práctica clínica contemporánea exige un equilibrio entre la innovación tecnológica y la sensibilidad humana”, comenta Barrios.

En el caso de Unifranz, destaca el modelo formativo basado en competencias, el cual ofrece una plataforma sólida para la preparación de nuevos psicólogos, en especial cuando se integra el uso y aprovechamiento de nuevas tecnologías. Esto permite desarrollar habilidades prácticas y adaptativas necesarias para una atención de salud mental efectiva en la era digital.

«La tecnología emergente ha transformado radicalmente la práctica psicológica, proporcionando herramientas innovadoras para la evaluación, el diagnóstico y la intervención. Nuestro programa académico integra de manera estratégica estas tecnologías en un modelo basado en competencias, asegurando que nuestros estudiantes desarrollen habilidades sólidas y estén preparados para enfrentar los desafíos de la práctica contemporánea. A través de experiencias prácticas inmersivas, como el uso de la cámara Gesell, la gamificación y el desarrollo de plataformas digitales, nuestros estudiantes adquieren un conocimiento profundo de las herramientas tecnológicas más avanzadas y aprenden a aplicarlas de manera ética y efectiva en el contexto terapéutico, desde las primeras etapas de su formación», añade la psicóloga.

La digitalización de diversas pruebas en beneficio de la población, como los test de orientación vocacional realizados la pasada gestión a cientos de jóvenes de unidades educativas, además de la aplicación de terapias en línea y la elaboración del podcast “Amar es educar”, a través de la plataforma Spotify de Unifranz El Alto, son algunos de los ejemplos de la adaptación de la carrera a la nueva era.

El futuro de la Psicología en la era de la tecnología está marcado por la colaboración y la complementariedad entre el humano y las nuevas herramientas digitales. El aprovechamiento de estos factores, de manera ética y estratégica, puede garantizar el cumplimiento de la misión de mejorar la salud mental y el bienestar de las personas en todo el mundo.

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