¿Qué buscan hoy las empresas?: Claves para destacar en el actual mercado laboral

El mercado laboral ha cambiado en los últimos años. La digitalización, la automatización, el trabajo remoto y las nuevas formas de interacción profesional han modificado los perfiles que las empresas consideran ideales. Hoy, más allá del título universitario o la experiencia laboral, lo que pesa al momento de elegir a un postulante es el desarrollo de competencias y habilidades clave, aquellas que permiten adaptarse, innovar y aportar valor en un entorno laboral cambiante.
Para Rafael Vidaurre, coordinador del Observatorio Nacional del Trabajo (ONT) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, es importante desarrollar habilidades y competencias clave para insertarse en un mercado laboral competitivo y en constante transformación. Esto incluye adaptarse a nuevas formas de trabajo y estar dispuestos a reinventarse continuamente. “La mayoría de los trabajos implican el uso de herramientas digitales, automatización o interacción con inteligencia artificial”, asegura.
El mercado laboral actual ha evolucionado significativamente y no se basa únicamente en el dominio de herramientas técnicas o conocimientos teóricos. Hoy en día, las organizaciones valoran más a aquellos profesionales que, además de contar con una sólida formación, demuestran habilidades interpersonales esenciales. Buscan a personas capaces de comunicar sus ideas con claridad, adaptarse con agilidad a los cambios constantes, colaborar de manera efectiva en entornos diversos e híbridos, y mantener una actitud proactiva hacia el aprendizaje continuo.
Entre las competencias más demandadas hoy, el experto menciona: pensamiento crítico y resolución de problemas; alfabetización digital y tecnológica; inteligencia emocional y empatía; adaptabilidad y aprendizaje continuo; colaboración remota y trabajo en equipo; innovación y creatividad; análisis de datos y pensamiento computacional; comunicación efectiva —oral, escrita y visual—; conciencia social y sostenibilidad; y gestión de proyectos con toma de decisiones ágil.
Mauricio Jiménez, analista de Reclutamiento y Selección en la Sociedad Boliviana de Cemento (Soboce S.A.), destaca que una de las competencias más valoradas en el entorno laboral actual es la capacidad de aplicar criterio propio. Sostiene que, más allá del conocimiento técnico, lo que marca la diferencia es la habilidad del profesional para analizar situaciones, tomar decisiones fundamentadas y aportar soluciones con juicio y responsabilidad dentro del contexto de trabajo.
“Es importante el trabajo en equipo. Realmente podemos ir desarrollando nuestras labores individualmente, podemos desarrollar nuestro conocimiento al momento de realizar nuestras tareas, pero nada va a poder ser posible si no nos integramos con otras personas. Siempre vamos a tener la dinámica de coordinar o ir desarrollando diferentes proyectos en los cuales se implican las demás áreas. Entonces, un punto importante es el trabajo en equipo y el criterio al momento de realizar el trabajo como tal”, explica Jiménez.
También, otro de los aspectos más valorados es la adaptabilidad al cambio. Las empresas buscan personas flexibles, que no se resistan a lo nuevo y que estén dispuestas a aprender continuamente. En un entorno donde las tecnologías y los procesos se actualizan de manera constante, la capacidad de adaptarse rápidamente se ha vuelto crucial.
Un estudio del World Economic Forum (WEF) identificó que, en la actualidad, el 60 % de los empleadores priorizan habilidades como el pensamiento analítico, la creatividad y la alfabetización tecnológica. Además, el mismo estudio sostiene que el 44 % de las habilidades actuales serán obsoletas en los próximos cinco años, lo que resalta la importancia de la adaptabilidad.
De la misma manera, un estudio de McKinsey & Company destaca que las empresas buscan candidatos con capacidad para aprender continuamente, denominándose como “learnability”, ya que las tecnologías evolucionan continua y rápidamente.
El manejo de herramientas tecnológicas ha pasado de ser una ventaja a una necesidad. Tener competencias digitales básicas —como el uso de plataformas colaborativas, hojas de cálculo, software de gestión o redes sociales— es casi obligatorio en cualquier puesto. Incluso en áreas no técnicas, la familiaridad con entornos digitales demuestra una actitud proactiva y moderna.
Los estudios recientes, como los realizados por el WEF en su informe, destacan las siguientes competencias y habilidades como las más demandadas:
- – Pensamiento crítico y resolución de problemas: la capacidad de analizar situaciones complejas, tomar decisiones basadas en datos y resolver problemas de manera creativa.
- – Comunicación efectiva: la habilidad de transmitir ideas claramente, tanto verbalmente como por escrito, y colaborar en equipos multidisciplinarios.
- – Adaptabilidad y resiliencia: la capacidad de ajustarse a cambios rápidos, como nuevas tecnologías o entornos laborales híbridos, y manejar la presión.
- – Trabajo en equipo y colaboración: la habilidad para trabajar de forma efectiva con otros, especialmente en equipos diversos y remotos.
- – Inteligencia emocional: la capacidad de entender y gestionar emociones propias y de otros para construir relaciones laborales sólidas.
Además, según Jiménez, los reclutadores valoran en gran medida la capacidad de organización y gestión del tiempo. Saber planificar tareas, cumplir plazos y priorizar actividades refleja profesionalismo y responsabilidad. La productividad individual impacta directamente en los objetivos colectivos, por lo que una buena gestión del tiempo es señal de eficiencia.
En resumen, las competencias más valoradas hoy reflejan un equilibrio entre conocimientos técnicos y habilidades humanas. Quienes logren cultivar este perfil integral tendrán mayores oportunidades de acceder a un empleo y de crecer profesionalmente. El talento ya no se mide solo por lo que se sabe, sino por cómo se actúa, se colabora y se responde a los desafíos de un entorno en permanente transformación.