Ahorro e inversión en UFV’s: ¿Qué tan beneficiosa es esta opción para la ciudadanía?

Imagen Unifranz

La economía boliviana atraviesa una fase crítica marcada por una creciente inflación, la pérdida progresiva del poder adquisitivo y una fuerte presión cambiaria. Aunque el tipo de cambio oficial del dólar se mantiene congelado desde 2011 en 6,96 bolivianos, en el mercado paralelo supera ya los 16 bolivianos, lo que evidencia una devaluación de facto de la moneda nacional. En este contexto, la Unidad de Fomento a la Vivienda (UFV) emerge como una herramienta clave para preservar el valor de los ahorros, al estar indexada a la inflación y ajustarse diariamente según el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

“Definitivamente tenemos que buscar instrumentos financieros que mantengan el valor de nuestro dinero. Pésima idea ahorrar en bolivianos en este momento”, advierte el economista Orlando López, docente de la carrera de Ingeniería Económica de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, enfatizando que la inflación proyectada del 15% superará con creces los rendimientos de depósitos a plazo fijo (DPF) tradicionales.

Frente a este panorama, el Gobierno nacional, a través del Banco Central de Bolivia (BCB), ha adoptado una serie de medidas para fomentar el ahorro en UFV. Desde el 28 de mayo, el BCB habilitó letras rescatables en UFV para entidades financieras, promoviendo así el desarrollo de nuevos productos de ahorro e inversión indexados a este índice. Asimismo, se habilitaron transferencias electrónicas entre cuentas en UFV y otras medidas propias del ente emisor.

Estas acciones buscan devolver la confianza al ahorrista común y diversificar las opciones disponibles para proteger el valor de su dinero. No obstante, su impacto dependerá no solo del acceso a estos productos, sino también de la credibilidad de las políticas públicas. 

“Existe una crisis de confianza en la banca, que debe ser revertida”, señala el docente universitario.

Ventajas

El ahorro en UFV ofrece ventajas claras. Al estar vinculado al IPC, el valor de los depósitos en esta unidad se ajusta con la inflación, permitiendo al ahorrista mantener su poder adquisitivo a lo largo del tiempo. 

Este tipo de ahorro también es útil para quienes perciben ingresos en bolivianos, ya que reduce su exposición al riesgo cambiario. Además, en el ámbito del crédito, tanto prestatarios como prestamistas se benefician: los primeros evitan desajustes derivados de la devaluación, y los segundos reducen el riesgo crediticio.

Sin embargo, también existen contras. Las entidades financieras no están obligadas a ofrecer cuentas en UFV, por lo que la disponibilidad de productos puede ser limitada. 

Por otro lado, si bien la UFV protege contra la inflación, sus rendimientos no siempre son atractivos frente a otros activos más dinámicos como acciones o criptomonedas, aunque estos últimos conllevan un mayor riesgo. López menciona que “la gente de estratos medios sí tiene capacidad de invertir en activos financieros, pero para el ciudadano común, incluso comprar alimentos no perecederos puede ser una forma de inversión frente al alza de precios”.

En ese sentido, el uso de UFV también puede variar según el perfil económico del ciudadano. Para sectores con menor capacidad adquisitiva, la prioridad sigue siendo proteger el ingreso diario. “No esperemos que la gente de a pie invierta en acciones o criptomonedas”, advierte López. “Pero sí podrían destinar una porción de sus ingresos a USDT virtuales o ahorrar en UFVs, si se habilita un acceso real y confiable”.

A nivel histórico, la UFV fue implementada en 2001 durante el gobierno de Hugo Banzer, y su valor inicial fue de Bs 1. Desde entonces, ha seguido una trayectoria ascendente reflejando la inflación acumulada. Hoy su cotización supera los Bs 2,06, lo que da cuenta del aumento sostenido del costo de vida en el país. Este índice también se utiliza para el cálculo de tributos y ajustes por mora en deudas fiscales.

En conclusión, ahorrar e invertir en UFV representa una alternativa viable para preservar el valor del dinero frente a la inflación y las tensiones cambiarias. No obstante, su éxito como instrumento financiero para la ciudadanía dependerá del compromiso institucional por garantizar transparencia, acceso equitativo y confianza en las políticas monetarias. 

Para el ciudadano común, cada decisión financiera debe evaluarse con atención a su contexto personal, pero instrumentos como la UFV podrían marcar la diferencia entre perder valor o resistir la incertidumbre económica.

avatar do autor
Manuel Joao Filomeno Nuñez

Deixe um comentário

O seu endereço de e-mail não será publicado. Campos obrigatórios são marcados com *