
¿Cómo prepararse para el empleo en tiempos de cambio?
La empleabilidad ya no depende solo del título. Aprende a destacar en un mundo laboral cambiante con habilidades clave y aprendizaje constante.
La empleabilidad ya no depende solo del título. Aprende a destacar en un mundo laboral cambiante con habilidades clave y aprendizaje constante.
En un entorno laboral marcado por la automatización, la inteligencia artificial y cambios constantes en los modelos de negocio, ya no es suficiente contar con un título universitario o una carrera consolidada. La verdadera ventaja competitiva radica en la capacidad de aprender, desaprender y reaprender, una habilidad que se ha vuelto esencial para sobrevivir profesionalmente y destacar en el mercado.
Invertir en educación brinda herramientas adaptativas para reinventarse y afrontar los desafíos del mercado laboral actual.
En un mundo marcado por la automatización, la inteligencia artificial y la hibridación de las labores, el trabajo se encuentra en un proceso de transformación. ¿Cómo serán los empleos del futuro? ¿Qué desafíos enfrentarán los colaboradores en una era de cambios acelerados? Este 1 de mayo, Día del Trabajador, es una fecha clave para reflexionar sobre las tendencias que están redefiniendo el mundo laboral y lo que podemos esperar en los próximos años.
Hoy, en pleno 2025, el mercado laboral es un terreno movedizo, impulsado por la tecnología, la globalización, las nuevas generaciones y un ritmo de cambio que no da tregua. En este nuevo escenario, mantenerse competitivo ya no es opcional, es cuestión de buscar la mejora continua para destacar en el trabajo y no quedar atrás.
El concepto de las empresas nómadas ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente con la evolución de las tecnologías de la información y la globalización. Hoy en día, cada vez más organizaciones adoptan el modelo nómada, lo que les permite operar desde cualquier lugar del mundo sin la necesidad de un espacio físico fijo. Este modelo ha transformado la forma en que las empresas funcionan, pero, al mismo tiempo, presenta una serie de beneficios y desafíos que deben ser cuidadosamente gestionados.
Nacidos entre mediados de la década de 1990 y principios de los 2000, los miembros de la generación Z irrumpieron en el mundo laboral con nuevas exigencias y prioridades. Digitales por naturaleza, inconformistas y con una visión renovada sobre el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, estos jóvenes están transformando la manera en que las empresas operan y gestionan su talento.
El panorama laboral está en constante evolución y, de cara al 2030, se vislumbran cambios radicales impulsados por avances tecnológicos, transformaciones demográficas y nuevas demandas sociales. A medida que la automatización y la inteligencia artificial ganan terreno, los empleos mejor remunerados del futuro probablemente pertenecerán a sectores de alta especialización, creatividad y capacidades tecnológicas avanzadas.
“Las empresas podrán elegir al profesional más atractivo sin importar el lugar donde viva”, lo que significa que los trabajadores competirán no solo con colegas locales, sino con expertos de todo el mundo”, señala Diego Urioste, coordinador del Observatorio Nacional del Trabajo (ONT) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
Cada vez más jóvenes se inscriben en las universidades e institutos de educación superior en Latinoamérica para estudiar una carrera; sin embargo, esta expansión no ha garantizado mejores oportunidades laborales para los graduados, que deben enfrentarse a un mercado saturado y competitivo, muchas veces, sin las herramientas adecuadas o en condiciones desfavorables.