En los últimos tres meses, Dadnin Saavedra Montecinos ha aprendido una valiosa lección: los sueños sí se pueden cumplir, pero requieren trabajo, dedicación y fe. Desde septiembre, se encuentra en el Hotel Ritz Carlton de Dove Mountain, en California (Estados Unidos), y tiene claro que su objetivo es continuar su carrera profesional en el extranjero, estudiando y capacitándose aún más. Ella se tituló en la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz La Paz.
“Mi experiencia en el Hotel Ritz ha sido excepcional. Es una oportunidad única que me ha permitido aprender y crecer tanto en hotelería como en servicio al cliente. Cada día es un desafío, una lección donde no solo adquiero habilidades prácticas, sino también una comprensión más profunda de lo que significa ofrecer un servicio de excelencia. Trabajar en un entorno tan exigente me ha ayudado a elevar mis estándares y reafirmar mi pasión por esta industria”, explica la joven.
Cuando emprendió esta aventura laboral, llevaba consigo una mochila llena de esperanza, pero también de dudas. Sin embargo, con el tiempo, se adaptó a su nuevo entorno. “Me sentí muy bienvenida. Los compañeros, tanto locales como internacionales, fueron muy cálidos y solidarios. En el Ritz hay un fuerte enfoque en la colaboración y la diversidad, lo que crea un ambiente de trabajo muy enriquecedor. El hecho de que vengamos de diferentes países y culturas no solo fortalece al equipo, sino que fomenta el respeto y apoyo mutuo”, señala.
Esta oportunidad llegó gracias a las gestiones de Servicios Estudiantiles de Unifranz, que facilitaron su acceso a uno de los hoteles más prestigiosos de Estados Unidos y del mundo. Su día a día está lleno de actividades dinámicas: atención a los huéspedes, apoyo en la organización de banquetes y eventos, y trabajo bajo un enfoque lateral que le permite tener una visión integral de las operaciones del hotel. “Este modelo me permite tener una visión integral de la información y las operaciones del hotel, enriqueciendo mi experiencia y habilidades”, sentencia.
Con su mirada puesta en el futuro, Dadnin ya ha desplegado sus alas y planea seguir volando hacia nuevos horizontes, quiere internacionalizarse. “A corto plazo, mi objetivo es completar con éxito este programa de intercambio y postularme para uno nuevo. A mediano plazo, me gustaría cursar una maestría que complemente mi carrera y me permita desarrollarme en un entorno profesional altamente competitivo, ya sea aquí o en otro país”.
Aunque se encuentra a unos ocho mil kilómetros de distancia de su tierra natal, Dadnin no olvida a Bolivia ni a Unifranz. “Obviamente, extraño mucho a mi familia, la comida y la cultura, que aunque no puedo tener cerca en mi día a día, siempre las llevo conmigo. De la universidad, lo que más extraño es la dinámica de aprendizaje, especialmente el apoyo constante de los docentes, quienes siempre estuvieron enfocados en mi desarrollo personal y profesional. También extraño a mis amigos y los viajes relacionados con la carrera”, comenta la joven paceña.
La carrera de Administración de Hotelería y Turismo es una de las más innovadoras de Unifranz, formando profesionales que convierten su pasión por viajar y explorar diferentes culturas en emocionantes oportunidades de trabajo. “La formación que recibí en Unifranz ha sido fundamental para mi desempeño laboral. Los conocimientos adquiridos en áreas como servicio al cliente, gestión hotelera, desarrollo de productos turísticos y estrategias de marketing me han proporcionado una base sólida para desempeñarme de manera efectiva en mi trabajo actual”, afirma Dadnin, quien a sus 25 años se siente preparada para afrontar nuevos desafíos en su carrera.