El Alto. Febrero. La historia de éxito que vamos a contar es fruto de la sumatoria de esfuerzos en beneficio de una vida y la auténtica convicción de superación por parte de Ovidio Machaca Apaza, un niño de apenas 11 años, que volvió a sonreír tras un tratamiento dental completo al que accedió gracias a una alianza estratégica entre el Gobierno Autónomo Municipal de El Alto, UNIFRANZ, el programa de Radial Mujeres Valientes Forjadoras de Futuro de Radio Estudio 94.0 FM y la dedicación del Dr. Álvaro Ibañez.
Sin duda este proceso por el que paso el niño Ovidio forjo mucha esperanza de cara a su futuro: “Quiero ser odontólogo y policía, y estudiar para ayudar a mi mamá”, expresó el pequeño Ovidio, con una sonrisa radiante.
La Unidad de Atención a la Persona con Discapacidad del Gobierno Autónomo Municipal de El Alto (GAMEA), desde un inicio ha realizado gestiones con la finalidad de beneficiar y colaborar de alguna manera a esta familia que vive en una situación compleja. «En este camino encontramos el apoyo de Instituciones que aportaron con una silla de ruedas para el niño, víveres y enseres para el hogar y felizmente el apoyo de un gran corazón de oro, Silvia Gemio locutora de Radio Studio, quien gestionó con el Dr. Alvaro Ibañez Durán, Director de la Carrera de Odontología de la Universidad Privada Franz Tamayo Sede El Alto, para que colabore con el tratamiento dental al niño Ovidio en la Clínica Ontológica UNIFRANZ», dijo la jefa de la Unidad Raquel Huanca.
El Dr. Ibáñez coordinó para que los equipos de trabajo de Odontopediatria e Integral Niños a cargo de la Dra. Carla Larrea, de la Clínica Metodológica UNIFRANZ, puedan realizar las intervenciones necesarias a Ovidio, con la promesa de que él, correría con los gastos de todos los tratamientos que se vayan a realizar durante la rehabilitación integral.
Al momento de entrevistar al Dr. Ibañez, nos contó cómo se sintió al ayudar al pequeño Ovidio; “La verdad que como universidad y carrera estamos muy vinculados a las campañas y trabajos que realiza la Fundación UNIFRANZ, a la cual le mostraremos el trabajo realizado en la Clínica Ontológica con el niño Ovidio, es así que pensamos extender esta experiencia y poder ser “Padrinos de Sonrisas” para ayudar a todos los niños que podamos”.
Asimismo, la Unidad de Atención a la Persona con Discapacidad fue la encargada de recoger a Ovidio y a su madre, para transportarlos en el vehículo del Bono Mensual para Personas con Discapacidad hasta la Clínica Odontológica UNIFRANZ, y a la conclusión de la consulta, llevarlos de regreso a su hogar.
Al inicio del proceso de curación, Ovidio se encontraba muy temeroso y nervioso, pero también sorprendido ya que iba a ser su primer encuentro con un dentista lamentablemente al revisarlo los médicos se dieron cuenta de que en su boca no existía ninguna pieza dental sana y que jamás se había lavado los dientes, sin embargo, el avance del tratamiento fue progresivo y los profesionales de la Clínica Ontológica UNIFRANZ, se ganaron la confianza del niño, logrando en Ovidio el gusto por asistir a cada una de sus consultas realizadas una vez por semana. El tratamiento duró aproximadamente 3 meses y el resultado después de haber pasado por limpieza dental, higiene bucal mediante la técnica de cepillado, curaciones y extracciones, fue sorprendente, ya que Ovidio concluyó todo el tratamiento lleno de amigos de la Clínica Ontológica UNIFRANZ. Profesionales que frecuentaron semana a semana al pequeño, y que además se encariñaron con él.
El resultado fue el milagro que solo se puede lograr cuando, por una noble causa, se unen instituciones, profesionales, medios de comunicación y el apoyo de la población universitaria para que un niño vuelva a sonreír.
“Participamos en el programa Radial Mujeres Forjadoras de Futuro, junto a la conductora Silvia Gemio Riveros, en el mismo ofrecíamos cirugías gratuitas y gracias al GAMEA conocimos a Ovidio. En la Clínica Odontológica nos pusimos a trabajar y con la Dra. Carla Larrea encargada de tratamientos pediátricos, ahora podemos ver el resultado en la vida de Ovidio”, contó el Dr. Álvaro Ibáñez Durán, quién a su vez cubrió con fondos propios todos los gastos del tratamiento para el menor.
Un pilar fundamental dentro de este proceso fue el apoyo de la madre de Ovidio; “Fue toda una sorpresa para mí, las señoritas de la alcaldía vinieron a mi casa, me dijeron que me ayudarían, en un principio no creía, pero ellos son ángeles que nos mandó diosito. Mi hijo ya no podía comer, puro caldito tomaba, que lloraba por que le dolía toda la boquita; ahora, no para de sonreír”, declaró la mamá, notablemente emocionada.
Ovidio tiene discapacidad física – motora, sin embargo, el día que el GAMEA lo visitó, él tenía toda la carita hinchada ya que además padecía de una inflamación aparentemente de un molar y al consultar a la madre del niño, comentó que llevaba varios días con dolor de muela y que afortunadamente ya le había calmado el dolor, pero su rostro estaba hinchado y le dolía. Además, el pequeño, presentaba la enfermedad de los huesos, y según informes médicos es una enfermedad hereditaria, ambos pies del niño son semi aplanados, por lo cual no presenta resistencia en los pies, por esa razón, Ovidio aún se transporta de un sitio a otro arrastrándose o en silla de ruedas.
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