Manuel Filomeno
La creatividad es una de las facultades primordiales del ser humano, a través de ella creamos y transformamos el mundo que nos rodea; sin creatividad no tendríamos obras de arte, edificios o tecnología, todas las invenciones humanas pueden trazar su origen a la creatividad de uno o varios individuos.
Para el director de la carrera de Administración de Empresas de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, Erick Vía, “la creatividad es la capacidad de las personas de crear ideas, conceptos, cosas o inventar algo. Es el uso de la imaginación para crear algo y puede manifestarse de maneras diferentes, aunque la mayoría de las veces se convierte en algo que se puede ver, oír, oler, tocar o saborear”.
Sin embargo, muchas veces esta capacidad humana se ve bloqueada por factores ambientales, cansancio o fatiga y es difícil volver a estimularla. Este bloqueo puede convertirse en una pesadilla para quienes viven de sus ideas y para combatirlo existen algunas medidas que podemos tomar.
El famoso publicista Larry Kim ha recogido y sintetizado una serie de maneras de entrenar y desarrollar la creatividad con unos ejercicios sencillos, prácticos y divertidos de realizar:
- Hacer garabatos (Doodles)
Hacer dibujos sin un formato en concreto, de manera libre, (Doodles, en inglés) puede ayudar a mejorar la concentración, la retentiva hasta un 29 % más y la memoria, así como a estar en el momento presente,
- Estudiar algo nuevo
La creatividad aflora cuando uno sale de la zona de confort, aprende y pone en práctica cosas nuevas, que traerán nuevas ideas y ocurrencias aparejadas.
Algunas buenas ideas pueden ser estudiar un nuevo idioma o un instrumento musical, la pintura, cerámica, la cocina o, simplemente, algo que nos llame la atención.
- Crea el ambiente adecuado para desarrollar la creatividad
Todos podemos ser creativos, pero tenemos miedo (consciente o inconsciente) de los reproches, críticas o similares de los demás a nuestras ideas.
Es fundamental poder desarrollar la creatividad donde no solo se repriman sino que se apoyen e incluso estimulan las iniciativas que surjan, por extrañas o “locas” que puedan parecer.
Por tanto, debe ser un ambiente en el que las personas (empleados, en el caso de empresas) puedan sentirse relajados y cómodos, sin que jefes o superiores miren con mala cara o cuestionen cada idea.
- Enfoque y movimiento
Larry Kim recomienda dar paseos, movernos físicamente y mirar el problema desde diferentes puntos de vista en lugares físicos distintos.
Mover el cuerpo ha demostrado tener efectos muy positivos en el pensamiento creativo.
- Llevar una libreta de ideas o bocetos
Tener siempre a la mano una pequeña libreta para apuntar todo eso que se te ocurre en un determinado momento y que muchas veces se olvida (incluso como nota de voz).
No tienen por qué ser grandes ideas; ni siquiera tienen que ser ideas completas. Lo principal es apuntar ese concepto y ver cómo evoluciona o qué nuevas aportaciones pueden complementarlas.
- Tener juguetes en la mesa
Hacer cosas con las manos ayuda a despejar la mente y que aflore la creatividad. Montar cosas con Lego, plastilina o hacer papiroflexia distrae la mente y muchas empresas animan a sus empleados a usarlas en su jornada laboral.
- Escribir relatos cortos de ficción (Flash fiction)
Redacta textos cortos de ficción de 100 palabras para ti mismo. Si queremos podemos compartirlos, pero no es necesario.
Dejar volar la imaginación con estos microrrelatos de ficción en torno a algún tema concreto ayuda a potenciar la creatividad.
Existen incluso comunidades en Internet, pero, como digo, no es necesario que nadie más que tú lo lea para estimular la creatividad.
- Haz y practica el ejercicio de los 30 círculos
La idea es dibujar en un papel 30 círculos y luego, en un minuto, intentar transformar tantos como puedas en algún objeto, por ejemplo una señal de dirección prohibida (añadiendo una raya horizontal), una cara sonriente (con dos círculos a modo de ojos y un semicírculo para la boca), un globo terráqueo (dibujando el contorno de Europa, por ejemplo, etc.).
- Jugar a intercambiar papeles
Hacer un intercambio de papeles y ponerse en el puesto de otro es una táctica muy buena para desarrollar nuevas soluciones y ver las cosas desde el punto de vista de otra persona, por ejemplo, un cliente o consumidor.
No hay que dar nada por hecho o por supuesto. Ponerse en los zapatos del otro y pensar qué podemos hacer para mejorar su experiencia es enriquecedor.
Incluso aunque nos hayamos metido en la mente de un cliente, una simulación de intercambio de papeles de verdad con compañeros de trabajo puede crear ideas creativas, así como dar soluciones a problemas existentes.
El valor de la creatividad
La creatividad puede ayudarnos a crear cosas tangibles o intangibles. Por ejemplo, las composiciones musicales, las ideas o los chistes son creaciones intangibles, mientras que las pinturas o los inventos son tangibles. La imaginación da vida a la creatividad o es su requisito imprescindible. No se puede ser creativo sin tener una buena imaginación.
En educación, la creatividad es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, flexibilidad, visión, iniciativa y confianza. Proyecta profesionales amantes de los riesgos y listos para afrontar los obstáculos y problemas que se les van presentando en su vida.