Por Manuel Filomeno
El uso constante de teclados y computadoras está teniendo un efecto negativo en las nuevas generaciones, desacostumbradas al uso del papel y el lápiz, generando la pérdida de una habilidad que tomó 5.500 años en desarrollarse, que es escribir a mano.
Escribir a mano es uno de los grandes logros de la humanidad, y conlleva grandes beneficios para el aprendizaje y la memoria, explica Clara Solórzano, jefa de Enseñanza Aprendizaje (JEA) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
“El escribir a manos nos permite organizar de mejor manera nuestro pensamiento. Además, está comprobado que la escritura manual genera un aumento de la capacidad de generar nuevas ideas en comparación con lo que sucede cuando se escribe en un teclado”, puntualiza.
Aunque aún no se comprende completamente el porqué de este fenómeno, la experta indica que parece que el acto físico de trazar letras y palabras con la mano es clave en la generación de procesos mentales que fortalecen la conexión entre lo que se escribe y la memoria.
“Es como si el proceso más íntimo y laborioso de la escritura manual permitiera al cerebro explorar nuevos caminos y conexiones que no serían tan accesibles de otra manera”, dice la pedagoga.
Perdiendo la capacidad de escribir a mano
“Creo que desde la primaria no escribo más de dos planas a mano y lo hago terrible, apenas sí puedo entender mi propia letra”, expresa Carlos Sánchez, estudiante universitario de 20 años.
Como él, muchos jóvenes y personas de mediana edad, si bien aprendieron a escribir a mano, están perdiendo la habilidad de hacerlo por falta de costumbre.
De acuerdo con investigaciones recientes, los jóvenes de la Generación Z se han acostumbrado tanto al uso de teclados y de redes sociales para conectarse con gente durante gran parte de su vida, que eso está afectando a su capacidad de comunicarse.
Los especialistas dan cuenta que, particularmente en este segmento de la población, se registran algunos problemas cuando escriben a mano: no escriben en línea recta en un hoja en blanco, su caligrafía es ilegible o les cuesta formular párrafos elaborados, lo que demuestra que eso es algo que afecta a todo el mundo.
La Universidad de Stavanger de Noruega, demostró que las personas que en un año deben centrarse únicamente en la escritura digital, acaban perdiendo su capacidad en la escritura manual en un 40% de los casos. La gente se cansa más escribiendo. Y en solo un año usando exclusivamente la escritura digital.
Según expertos, a pesar del cambio hacia el aprendizaje digital, la transición de la pantalla al lápiz ha resultado difícil, ya que muchos estudiantes tienen dificultades para escribir de forma legible o formular argumentos coherentes en textos escritos largos.
Otro problema que señalan los expertos es la dificultad que enfrentan los estudiantes de la Generación Z para escribir oraciones largas y estructuradas, es decir evitan las oraciones largas y, a menudo, no logran escribir párrafos adecuados. Piensan que colocar oraciones independientes una tras otra constituye un párrafo.
Fomentar la escritura manual
Solórzano sostiene que se debe retomar la motivación de los estudiantes para escribir a mano y plantea que ellos (los jóvenes) vean en la práctica de la escritura una forma muy personal de expresión, que pueden dejar plasmada en un diario o enviarse cartas a su yo del futuro.
Estas son algunas maneras en las que se puede incentivar la escritura a mano:
- Crea un diario personal
Fomentar la escritura a mano puede ser tan simple como mantener un diario. Anima a las personas a escribir sobre su día, sus pensamientos, emociones o cualquier tema que les interese. Esto no solo mejora la escritura a mano, sino que también promueve la reflexión y la creatividad.
- Escribe cartas o notas
Recuperar la costumbre de escribir cartas a amigos y familiares o dejar notas escritas a mano puede ser una forma encantadora de fomentar la escritura. No solo es una manera personal y significativa de comunicarse, sino que también ayuda a practicar la escritura regularmente.
- Participa en clases de caligrafía
Tomar clases de caligrafía puede ser una experiencia divertida y educativa. Aprender diferentes estilos de escritura no solo mejora la destreza y el control, sino que también puede ser una forma de expresión artística.
- Crea listas y planificadores escritos
Usar listas y planificadores escritos a mano en lugar de aplicaciones digitales puede ser una excelente manera de practicar la escritura. Crear listas de tareas, planificar el día o la semana y escribir metas puede fomentar el hábito de escribir a mano.
- Participa en talleres o clubes de escritura
Unirse a talleres o clubes de escritura creativa puede ser una motivación adicional. Compartir y discutir trabajos escritos con otros puede inspirar y mejorar las habilidades de escritura. Además, puede ser una oportunidad para recibir retroalimentación y mejorar continuamente.
Escribir a mano, finalmente, no es simplemente una técnica de escritura, sino una herramienta poderosa para el pensamiento, la creatividad y la expresión personal, reflexiona la académica.
“A medida que avanzamos en la era digital, no debemos perder de vista el valor intrínseco de este acto aparentemente simple, que nos conecta con nuestra historia y nos ayuda a dar forma a nuestro futuro”, concluye.