Nuevos paradigmas y renovados desafíos caracterizan a la humanidad en este nuevo siglo. Si antes había un culto a la belleza y a la imagen, hoy esa tendencia se ha concentra en el valor de marca y se profundiza, aún más, en un mundo transita por la era de lo visual.
Las marcas, poco a poco, se están adaptando a los tiempos digitales. Las marcas son mucho más que un nombre o un logotipo, son un conjunto de valores que los usuarios asocian a una organización, producto o persona; es aquello que genera preferencia en el usuario por lo que es necesario innovar permanentemente.
La publicista española Olga Llopis sugiere a las nuevas generaciones que están incursionando en el mundo de la publicidad y el diseño gráfico tener curiosidad, pasión por descubrir nuevas cosas y disfrutarlas al máximo.
“Lo principal es saber lo que quieres (…). Esta pasión por descubrir mundos nuevos, al menos a mí es lo que me ha hecho llegar donde estoy, mi paso del diseño gráfico al mundo de la empresa ha sido más por la curiosidad y la pasión que llevas internamente es lo que hace que puedas trabajar y puedas disfrutar de esta profesión (…)”, indica la experta.
Con más de 15 años de experiencia en proyectos de branding, desde la creación y la transformación hasta el impulso final de la marca, Llopis es socia directora de Comuniza, una agencia dedicada a crear y transformar marcas para que sean más relevantes.
Nuevas tendencias y las marcas
“Yo creo que la principal tendencia es centrarse sí o sí en el usuario, tener presente que las marcas no son propiedad de las empresas, sino que están al servicio de los usuarios y cómo tenemos que adaptar toda la comunicación, hacia afuera para que se vincule con el usuario”, asegura la oradora del Grand Prix de la Publicidad organizado por Unifranz.
La marca es aquello que genere preferencia en el usuario. Así que la principal tendencia radica en la experiencia del usuario.
Recientemente, ha surgido otro concepto vinculado a la marca que es la omnicanalidad. Es decir, cómo conseguimos que la marca esté presente en los múltiples canales que hay, ya sean soportes físicos, digitales, redes sociales, publicitarios más tradicionales, en los que solo hay comunicación y,en cambio, en otros hay una comunicación bidireccional.
Así es cómo la marca consigue estar presente en todos los soportes omnicanales. Es decir, ser la misma marca, pero con la capacidad de adaptarse a todos los canales y a las necesidades que tiene cada usuario.