Por Manuel Filomeno
El comercio electrónico se ha vuelto parte de nuestras vidas, millones de transacciones se realizan cada día; ya sea para comprar comida, prendas de vestir, electrodomésticos o bienes intangibles como cursos o “skins” para videojuegos. Pero ¿sabía usted cuál fue la primera compra por Internet?
En febrero de 1994, la cadena de comida rápida Pizza Hut lanzó PizzaNet un servicio que permitía pedir pizzas a través del Internet, toda una novedad entonces, cuando la red mundial solo contaba con alrededor de 20 millones de usuarios alrededor del mundo (hoy en día supera los 5.500 millones).
PizzaNet trascendió el e-commerce en un momento en el que los navegadores apenas admitían imágenes, y la web estaba en sus etapas iniciales fuera del ámbito académico.
“El e-commerce tuvo sus inicios en los años 90 y desde esa época tuvo un crecimiento exponencial, sobre todo con el avance de la tecnología y el acceso a Internet”, comenta Esteban Rioja, director de la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.
El experto indica que, en un principio, sólo eran conocidas las transacciones simples, como la venta de productos con pago contra entrega, es decir, en los primeros días del e-commerce, el Internet funcionaba más como un catálogo, que como un verdadero canal de ventas.
“Ahora, el e-commerce considera muchas más actividades que incluyen actores como los minoristas, comercio entre empresas, ampliación de su aplicación a servicios, entre otras. Las plataformas ahora son más sofisticadas y ofrecen una experiencia distinta a cada cliente. Con el avance de la inteligencia artificial y el análisis de datos, este proceso es ahora mucho más personalizado y es un proceso que se realiza a nivel global”, agrega Rioja.
Según datos de Statista, en 2023, el comercio electrónico a nivel mundial generó ingresos superiores a los 5.700 millones de dólares, y se proyecta que esta cifra supere los 8.000 millones anuales para el 2027.
En Bolivia, según el estudio “Mapeo del Ecosistema de Tecnología Digital 2022 (Mapeo TIC)”, elaborado por Funda-Pró, Solydes, Emprender Futuro, BIM Asset Management, ICCO Cooperación y Cainco, en 2023, el 23% de todas las startups en el país se dedican al e-commerce.
Por otra parte, la última versión del estudio estadístico “1.000 Bolivianos Dicen”, de Omnicom Media Group (OMG), lanzada el año pasado, reveló que las transacciones utilizando pagos por QR se incrementaron de un 27% a un 60% entre las bolivianas y bolivianos desde mayo de 2022 a septiembre de 2023. En el mismo periodo, el pago con tarjetas subió del 28% al 36%. Según el informe final del estudio de OMG, en el último mes el 57% de los encuestados utilizó apps para realizar sus compras.
Rioja indica que la principal ventaja del e-commerce sobre el comercio convencional es la accesibilidad, ya que se han eliminado las barreras geográficas y los consumidores pueden acceder a productos provenientes de cualquier parte del mundo. Asimismo, los usuarios se benefician de un mejor servicio y de métodos de pago alternativos.
“El comercio se hizo más accesible, se eliminaron barreras geográficas ya que cualquier usuario puede hacer compras desde su espacio a cualquier otro rincón del mundo. Gracias a las nuevas tecnologías, se puede entender mejor al cliente, ofrecer una experiencia de usuario única y aumentar la fidelidad, fomentando nuevos métodos de pago como el QR o transacciones en línea, mejorando la logística de envíos y sobre todo aumentando la popularidad del marketing digital”, acota.
Perspectivas
- Según medios internacional, este año, más del 21% del total de las ventas minoristas se realizarán en línea. Se prevé que el porcentaje aumente hasta el 24% hacia el 2026.
- Asimismo, Amazon representa el 37,8% de las ventas del sector, la mayor cuota de mercado de todas las empresas participantes. Esa firma fue fundada por Jeff Bezos en 1994, el mismo año que la primera venta hecha a través de e-commerce.
- Las estadísticas reflejan que el 91% realiza compras en línea desde el teléfono.
El experto apunta a que, en los próximos años, el e-commerce evolucionará aún más, gracias al uso de las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y que el acceso a Internet siga creciendo.
“Al igual que la tecnología, la perspectiva para el e-commerce es alta. Seguirá creciendo conforme al avance de herramientas como la inteligencia artificial, marketing digital, conexión de Internet sigan siendo tendencia. Mientras más acceso a Internet tengan los usuarios, más fluido será el proceso de compra y venta, que al mismo tiempo influenciará en los consumidores”, concluye.